En la oposición creen que, así planteada, la derogación del impuesto al cheque, con la que amenazó esta tarde la presidenta ante gobernadores oficialistas, es sólo una estrategia de dilación y no sería aplicable sin un cambio profundo en el sistema tributario.

"La única posibilidad de derogar el Impuesto al Cheque sería mediante una reforma impositiva integral, seria y equitativa", consideró Gerardo Morales, jefe del bloque de senadores de la UCR.

"El gobierno sigue haciendo jugadas para distraer el debate central que es la coparticipación plena del impuesto al cheque, para que las provincias cuenten con los fondos necesarios para funcionar y los gobernadores dejen de ser sus rehenes", agregó el legislador.

En diálogo con LPO, el diputado de Proyecto Sur Claudio Lozano, uno de los puntales de los once que integran el interbloque de centroizquierda en el recinto de la Cámara baja, disparó por igual a kirchneristas y opositores.

“El anuncio de la presidenta va en línea con la lógica de comportamiento del oficialismo y de cierta parte de la oposición de tensionar la situación política en lugar de resolver los problemas que se presentan”, evaluó.

Y rechazó de plano cualquier utilización de los 23.543 millones de pesos que el Gobierno prevé recaudar este año con el impuesto al cheque, eje de la disputa. “Coparticiparlo resulta absurdo porque se intenta resolver problemas financieros de las provincias con un impuesto distorsivo y regresivo que no debería existir, porque grava la capacidad contributiva mal y de manera desigual. Es un contrasentido”, afirmó.

Lozano tiró una contrapropuesta para suplir ese faltante de recursos: “Hay que aumentar las contribuciones patronales a los niveles de 1993, cuando (el entonces ministro de Economía Domingo) Cavallo las redujo a la mitad con la excusa de la convertibilidad, que ya no existe. Serían 15.700 millones de pesos más para el Anses de forma genuina. Y a ese organismo deberían dejar de girarse el 15% de la masa coparticipable”, planteó.

“Sólo una estrategia de dilación”

El economista Jorge Sarghini, diputado nacional del peronismo disidente hasta diciembre, consideró “una contradicción” que ahora el Gobierno proponga eliminar el impuesto al cheque después de haberse resistido a aumentar la porción de ese fondo que le gira a las provincias. “Es una estrategia dilatoria”, agregó.

Sarghini recordó que cuando trató los presupuestos en el Congreso propuso que “los excedentes de la recaudación se usaran para una reforma impositiva a favor del empleo. Y uno de los impuestos que había que empezar a eliminar era el impuesto al cheque. No se hizo en un momento de holgura fiscal, llama la atención que quieran hacerlo ahora” dudó.

El economista reclamó una reforma fiscal y una nueva ley de coparticipación, “dos cosas que hacen falta. Además, sería bueno que este año distribuyan los Aportes del Tesoro Nacional por más de 9000 millones de pesos que le corresponden a las provincias. Así sí sería creíble que quieren derogar el impuesto al cheque”, completó.

-Usted vio el presupuesto de este año ¿Qué erogación tendría que evitar el Gobierno en caso de eliminar o coparticipar el impuesto al cheque? –preguntó LPO

-El gobierno debe elegir cuáles son las prioridades que debe financiar. Es el que elige, por ejemplo, si debe sostener a las provincias antes que al fútbol o a Aerolíneas. No hay que caer en la trampa de decir de dónde hay que sacar los recursos.

-¿Se debería reconsiderar el presupuesto, como reclama la oposición?

-Lo razonable es que reelabore, porque el proyecto que se planteó en su momento y el oficial que se aprobó no estaban de acuerdo con la realidad. Pero mientras existan los superpoderes y el Gobierno pueda reasignar partidas, no tiene sentido. Quizá eso debería ser lo primero a cambiar.