Fútbol gratis: Grondona usa los $600 millones para su reelección en la AFA
Con la idea de "socializar" los fondos que el Estado le gira a la entidad, se alineó con los clubes chicos, que son mayoría. De esta manera, busca garantizarse su continuidad como titular de la Asociación de Fútbol que ejerce desde hace 30 años.
Julio Grondona usa los $600 millones que le gira el Estado por "Fútbol para Todos" para garantizarse su reelección al frente de la AFA. A través de la "socialización" ese dinero planea recibir el apoyo de los clubes chicos que son mayoría en la Asociación de Fútbol.

Según el diario La nación, el veterano dirigente tuvo una influencia decisiva en la aprobación del nuevo esquema por el que los clubes se repartirán el dinero proveniente de la televisación de los partidos. Los grandes –salvo River, por su particular situación política– quedaron en offside. Sin plan B y casi sin margen de reacción.

El escenario del fútbol argentino cambió luego de la ruptura del contrato con la empresa TSC. Con los 600 millones de pesos asegurados por el Estado, al presidente de la "casa del fútbol" le competía solucionar la distribución del dinero. Si bien en un primer momento Grondona se declaró "prescindente" en la discusión, los clubes grandes escucharon una palabra en boca del histórico caudillo y temblaron: Don Julio habló de "socializar" los ingresos. De inmediato, Boca, San Lorenzo, Independiente y compañía supieron de qué lado estaría el vicepresidente más longevo de la FIFA.
Fútbol gratis: Grondona usa los $600 millones para su reelección en la AFA

"Con este tema, Grondona hace el mismo manejo de siempre: repartir y premiar a los que él quiere", argumenta un dirigente que está en la vereda de enfrente. El método Grondona no es nuevo: muchos directivos del ascenso –como Javier Marín, vicepresidente de Acassuso, Claudio "Chiqui" Tapia, presidente de Barracas Central y yerno del todopoderoso Hugo Moyano, o Noray Nakis, hombre fuerte de Deportivo Armenio e integrante del Departamento de Selecciones de AFA– pueden dar fe de los beneficios que acarrea alinearse con el poder que ejerce el empresario de Sarandí. Marín y Nakis fueron espectadores de lujo en los partidos que la selección disputó en el Mundial de Alemania, hace tres años. La figura de Nakis irradia aún más poder: "Es el filósofo de cada reunión de comité ejecutivo", ironizó un asistente habitual a esos cónclaves.

Además de Marín, Tapia y Nakis, Grondona se apoya en José Luis Meiszner, el ex presidente de Quilmes que mantiene fluidísimos vínculos con la Casa Rosada –se reconoce amigo personal del Jefe de Gabinete, Aníbal Fernández–. Meiszner, además, integra el organigrama de la AFA como secretario general de la entidad. Otros integrantes del círculo aúlico que rodea a Grondona son Luis Segura –presidente de Argentinos Juniors– y otro Grondona, Julito, presidente de Arsenal. Todos tienen un denominador común: no pertenecen a un equipo grande.

"Fui demasiado bondadoso. He dado dinero, mejor dicho la AFA, y les di la oportunidad de gastar de más", reconoció Grondona en una entrevista con La Nacion publicada el 29 de julio. Ya desde entonces les apuntaba a los clubes grandes, que históricamente recibieron la mayor tajada de los billetes de la TV. Y gran parte de los millones que la AFA presta a "interés cero" a través de su cuenta corriente. Ya no más. Ahora, Grondona mira a los clubes de mayor convocatoria con recelo. "Lo que más molesta es el destrato", aseguran esos mismos dirigentes, que pretendieron hacerle entender que revea su apoyo a la socialización de los ingresos televisivos. Grondona ni los escuchó.

"La AFA es una superestructura que no da ninguna información sobre el destino del dinero", se quejan los grandes. Por lo bajo, admiten que fueron "obligados" a rescindir el contrato con TSC y que, proporcionalmente, ahora cobran menos dinero. Mientras, el G 14 –que integran los otros equipos de primera– festeja ante los micrófonos por el nuevo esquema de distribución de los ingresos.

Para los clubes con menos marketing, Grondona pasó a ser un Robin Hood del siglo XXI. Gracias a su apoyo, los equipos recién ascendidos –por ejemplo– cobrarán lo mismo que el último campeón de América –Estudiantes de La Plata–; gracias a Grondona, el equipo de la familia, Arsenal, recibirá el mismo dinero que Lanús, un animador de los campeonatos locales en los últimos años. Ni hablar de las categorías que están en el sótano del fútbol argentino. Los clubes del ascenso cobrarán en la temporada 2009/10 un dinero que hace unos años parecía impensado: entre la B Nacional, B, C, D y el Consejo Federal –que organiza los torneos argentinos– se repartirán un monto récord de 133,8 millones de pesos. "No quiero dejar deudas, quiero que haya recursos y clubes saneados", le había anticipado a La Nacion en aquella nota de julio.

Una montaña de dinero que tiene una explicación. Grondona, que no es ningún improvisado, sabe que ese histórico flujo de billetes se traduce en votos. Y pulgares hacia arriba a la hora de valorar su gestión. Todo eso, sin contar los 28 millones que Tele Red Imagen S.A. –una empresa integrada en mitades por Clarín y Torneos y Competencias– paga por los partidos de la B Nacional, y los 14 millones que abona por los encuentros de la B. Son 42 millones de pesos que, hasta ahora, no se han socializado.

La amenaza de diáspora que intentaron los clubes grandes no lima la mayoría que el presidente de la AFA supo conseguir. Todo lo contrario: su acercamiento a las entidades de menores recursos limpia su imagen y allana el terreno para lo que vendrá. A lo largo de toda su trayectoria, Grondona dio sobradas muestras de cómo construir mayorías. El reparto del dinero versión 2009 es una más. "Quiero morir en la pista. Pero si vienen 5 o 6 clubes normales y me piden que me vaya, me voy", había avisado Grondona en aquella entrevista con La Nacion publicada en julio. Está por verse si los grandes, en pie de una guerra que por ahora sólo tiene balas de fogueo, se animan a dar el paso. Mientras tanto, Grondona planifica sus viajes a Paraguay, Emiratos Arabes, Suiza y Sudáfrica, que lo tendrán lejos casi hasta Navidad. Se siente fuerte. Como siempre.

Publicar un comentario
Para enviar su comentario debe confirmar que ha leido y aceptado el reglamento de terminos y condiciones de LPO
Comentarios
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellas pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algun comentario violatorio del reglamento de terminos y condiciones será eliminado e inhabilitado para volver a comentar.
  • 2
    ana
    26/11/09
    18:43
    jajajaja, me encanta!!, es para todos los giles que salieron a decir,FUTBOLGRATIS PARA TODOS LOS ARGENTINOS.....NUEVAMNETE K MOSTRO QUE LO UNICO QUE LE INTERESA ES QUEDARSE EN EL PODER PARA SEGUIR ROBANDO
    Responder
  • 1
    Ciudadana
    26/11/09
    16:22
    Y qué otra cosa esperaban?
    Responder
Noticias relacionadas

Aníbal y el "fútbol gratis": ya perdió $240 millones y los anunciantes lo esquivan

"Perdió categoría y las transmisiones son pobres. No dan ganas de ver los partidos", afirmó una agencia especializada, y agregó que "los sponsors grandes no quieren participar de algo que carece de calidad". El proyecto que dirige el jefe de Gabinete ya acumula un déficit millonario. Ayer se denunció que desesperado, Aníbal Fernández presionaba a empresas para que publiciten.

Fútbol gratis: El Apertura terminó con un déficit de $180 millones

Cristina Kirchner se había comprometido a pagarle a la AFA $600 millones de pesos por año durante una década. Para ellos a mitad de temporada debería haber facturado $300 millones para no estar en rojo, pero apenas alcanzó entre $107 y $126 millones. El principal auspiciante en la televisación del torneo fue el gobierno nacional.

Aníbal Fernández admitió que el gobierno perdió plata con el fútbol, pero le restó importancia

El jefe de Gabinete hizo un balance positivo del programa "Fútbol para todos", porque "todos pudieron ver los partidos". Reconoció que el gobierno resignó fondos al hacerse cargo de la transmisión de los partidos, pero lo minimizó. "No había vocación de ganar dinero", reconoció. Así y todo, anunció que le entregarán el negocio a privados para, al menos, poder saldar los costos.