03 de mayo, 2024
Pablo Rojo
“Es necesario volver urgente al FMI”
El economista Pablo Rojo explicó que el organismo ya no pide, como hacía en otras épocas, que el Gobierno contraiga la actividad y que se eche gente. "Privarnos de la asistencia financiera del Fondo para sostener políticas expansivas y evitar una caída de la producción y del empleo, es un disparate", sostuvo.
Néstor Kirchner admitió que está pensando en acudir al FMI y el prestiogioso economista, Pablo Rojo, lo avala. “Es necesario volver urgente al FMI”, sostuvo hoy en el programa Puro Periodismo de Radio El Mundo.
Explicó que es una herramienta que le permitiría desahogar un poco la delicada situación impositiva que vive el Gobierno y establecer políticas que incentiven la actividad y mantengan el empleo. “El organismo ha puesto en marcha programas de asistencia financiera en seis ocho países. Los ayuda para que sostengan políticas económicas expansivas y no les pide, como en tras épocas que contraigan la actividad y que se eche gente. Sino que pide que eviten todos los efectos recesivos de la crisis”, afirmó. Y calculó que Argentina, que canceló su deuda con el Fondo, tendría derecho a reestablecer una línea de crédito de 8.000 millones de dólares.
Un monto nada despreciable ante los números que dio a conocer ayer el Indec sobre la balanza comercial. Las exportaciones argentinas en enero cayeron un 36% interanual y las importaciones, un 38%.
Al economista le pareció preocupante el derrumbe de las ventas en el exterior. “Está bajando la demanda de productos argentinos como autos y autopartes con destino a México o Brasil y esto refleja una fuerte recesión en Argentina y el mundo”, afirmó.
Pero le pareció más alarmante la caída de las importaciones., reconoció. “Caen las importaciones porque las empresas están previendo un derrumbe de la demanda en Argentina y no compran los insumos”.
Sostuvo que el Gobierno va a tener que replantear su política económica. “No sólo respecto al agro sino también a todas las actividades porque ha subestimado a esta crisis. Hoy desincentiva al campo que es uno de los pocos sectores que aún tiene un potencial importante porque los alimentos no caen a la misma velocidad que los bienes industriales y, como las exportaciones caen y el nivel de actividad también, la situación impositiva va a ser delicada”, dijo. Sin embargo recalcó que, pese a esto, Argentina “no va a caer en default, pero sí le va a quitar margen de maniobra al Gobierno para mantener políticas reactivas que mantengan el nivel de actividad”.
Explicó que es una herramienta que le permitiría desahogar un poco la delicada situación impositiva que vive el Gobierno y establecer políticas que incentiven la actividad y mantengan el empleo. “El organismo ha puesto en marcha programas de asistencia financiera en seis ocho países. Los ayuda para que sostengan políticas económicas expansivas y no les pide, como en tras épocas que contraigan la actividad y que se eche gente. Sino que pide que eviten todos los efectos recesivos de la crisis”, afirmó. Y calculó que Argentina, que canceló su deuda con el Fondo, tendría derecho a reestablecer una línea de crédito de 8.000 millones de dólares.
Un monto nada despreciable ante los números que dio a conocer ayer el Indec sobre la balanza comercial. Las exportaciones argentinas en enero cayeron un 36% interanual y las importaciones, un 38%.
Al economista le pareció preocupante el derrumbe de las ventas en el exterior. “Está bajando la demanda de productos argentinos como autos y autopartes con destino a México o Brasil y esto refleja una fuerte recesión en Argentina y el mundo”, afirmó.
Pero le pareció más alarmante la caída de las importaciones., reconoció. “Caen las importaciones porque las empresas están previendo un derrumbe de la demanda en Argentina y no compran los insumos”.
Sostuvo que el Gobierno va a tener que replantear su política económica. “No sólo respecto al agro sino también a todas las actividades porque ha subestimado a esta crisis. Hoy desincentiva al campo que es uno de los pocos sectores que aún tiene un potencial importante porque los alimentos no caen a la misma velocidad que los bienes industriales y, como las exportaciones caen y el nivel de actividad también, la situación impositiva va a ser delicada”, dijo. Sin embargo recalcó que, pese a esto, Argentina “no va a caer en default, pero sí le va a quitar margen de maniobra al Gobierno para mantener políticas reactivas que mantengan el nivel de actividad”.
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