Ayer y desde Londres, Mauricio Macri confirmó que intentará unificar las elecciones y que Gabriela Michetti será candidata. Juntando los dos datos, se sobrentiende que en ese mapa encabezará la lista a diputados nacionales. Toda esta definición dejó al desnudo la ausencia de línea sucesoria de macrismo puro en la ciudad. Situación que ya están trabajando para subsanar.

Al salto de Michetti al terreno nacional se le suma, además, el fin del segundo mandato consecutivo de Diego Santilli como legislador. Esta situación deja vacío dos cargos: la vicejafatura de Gobierno y la Vicepresidencia 1º de la Legislatura. Por eso, cuando se reestructure el poder político de PRO el cargo que hoy ostenta Santilli es el que tácitamente quedará como el “número dos” de la ciudad.

En cuanto a Santilli, aunque algunos lo ubican como un buen candidato para seguir a Michetti en la lista para diputado nacional, otras voces dicen que el que ex director del Banco Ciudad no está interesado en eso. Por eso, su futuro podría estar en algún puesto en el Poder Ejecutivo

Quien sea el candidato que encabece la lista a legisladores porteños de PRO será quien seguramente ocupe ese sillón de Santilli, el más poderoso después del propio Macri con la salida de Michetti. Ese lugar ya tiene un candidato: Esteban Bullrich.

Las deudas de Macri

El hoy diputado nacional es un hombre muy valuado en el macrismo y con quien Macri se siente en deuda por varias cosas. Entre ellas, figura el haber tomado el Ministerio de Desarrollo Social en un momento muy caliente y haberlo sacado adelante. Además, con la vuelta de María Eugenia Vidal al puesto luego de su licencia no reprochó tener que volver a su banca de diputado en el Congreso. Por otro lado está su función en la interna contra Ricardo López Murphy. Enfrentado con Macri luego de su sociedad política, Bullrich le quitó la presidencia de Recrear y lo sacó del partido.

Desde el macrismo, aseguran que aunque públicamente Horacio Rodríguez Larreta pueda decir que su candidato para la Vicepresidencia de la Legislatura es el legislador peronista Cristian Ritondo, creen que en realidad el jefe de Gabinete porteño es el principal impulsor de Bullrich. Lo ven importante para ese cargo, además, por el excelente vínculo que tiene con fuerzas opositoras, como la Coalición Cívica.

Ante este panorama es que podría entrar a jugar de nuevo la interna entre Larreta y Michetti. Macri, un poco harto de eso, buscaría en Bullrich un hombre despegado de la imagen de ambos para no sumar al entuerto.

Para su vicejefe de Gobierno, el consuelo podría ser un cargo para Martín Borreli, un hombre de su riñón, ya que Marcos Peña, secretario General, no puede ser electo por haber cumplimentado sus dos mandatos.

Ese cargo, piensan algunos, puede ser la presidencia de bloque. Es que ese puesto, hoy en manos de Oscar Moscariello, es otra moneda de cambio que Macri quiere tener a mano para mantener contenta a la tropa. Ahí también podría entrar Álvaro González, a quien el salto le caería como una especie de premio.

En la misma situación que Peña se encuentra otro que candidateaba bien para encabezar la lista y ocupar la Vicepresidencia de la Legislatura, lugar que ocupó antes que Santilli: Santiago de Estrada. También agotó sus períodos como legislador y hoy ocupa un sillón silencioso en la Auditoría General de la Ciudad de Buenos Aires (AGCBA).