El diputado nacional por el Partido Socialista, Eduardo Di Pollina, manifestó en esta entrevista con La Política On Line minutos antes del inicio de la sesión en la que el gobierno logrará sancionar los polémicos Superpoderes que "desde las elecciones de octubre de 2007 Kirchner tiene una vocación hegemónica irrefrenable" y dijo que la decisión de hoy "implicará un daño muy fuerte para la salud de las instituciones".

La Política On Line: Hoy nadie duda de que finalmente los Superpoderes serán sancionados.

Di Pollina: Es cierto, lamentablemente es asi. La posición del partido es sin duda opuesta a la del Ejecutivo en su intención de otorgarle al jefe de Gabinete las facultades anticonstitucionales, por cierto, para que pueda reasignar partidas presupuestarias sin pasar antes por previo control del Congreso, y desoyendo lo que se vota a comienzos de cada año que es el presupuesto anual.

Sin duda que esta prerrogativa es negativa para el funcionamiento de cualquier país que se precie de tener un verdadero sistema republicano.

LP: ¿Por qué el gobierno toma estas medidas, contando según las encuestas con una adhesión importante?

Di Pollina: Es llamativo, pero desde las elecciones legislativas de octubre pasado se ha transformado en una regla común. Primero fue el Consejo de la Magistratura, luego los Decretos de Necesidad y Urgencia y ahora vienen por esto. Nosotros creemos que es una clara vocación de concentración de poder y que desde las elecciones de octubre de 2007 Kirchner tiene una vocación hegemónica irrefrenable.

Ningún parlamento serio puede delegar en un jefe de Gabinete que representa lógicamente a un gobierno decisiones de tamaña magnitud.

LP: ¿Y cual es el rol del Congreso y de la oposición en este marco?

Di Pollina: El rol del Congreso es claro y esta establecido en la Constitución Nacional. Que desde el Ejecutivo lleven adelante estas medidas para quitarle fuerza, es otra discusión, pero nosotros tenemos una misión clara por cumplir.

Por otro lado, la oposición debe seguir insistiendo en controlar al gobierno y en críticas todas estas medidas que dañan seriamente a nuestras instituciones. La verdad estamos viendo con mucha preocupación este avance, porque deteriorará directamente la calidad de la democracia en Argentina.