La reglamentación de la quita de subsidios para el gas y el agua llegó con una sorpresa. Además del recorte de los aportes que hace el Gobierno, habrá un marcado aumento del precio del gas y del componente que utiliza AySA para valorizar sus servicios.

Según informó Clarín, técnicos de las gasíferas y analistas energéticos estimaron que los aumentos hasta agosto para los usuarios residenciales podrían rozar el 500%, casi el doble de lo que habían anunciado Axel Kicillof y Julio De Vido.

Por el lado de AySA, las subas finales estarían más en línea los porcentajes del 170% al 406% que habían informado los funcionarios. No obstante, no se descarta que el impacto real del alza del 37% aplicada al coeficiente tarifario clave de AySA y la quita escalonada de subsidios termine generando más aumentos de los previstos, destaca el diario.

Junto con los incrementos tarifarios, el Gobierno también oficializó el nuevo “esquema de uso racional del gas” que le permitirá a los usuarios hogareños esquivar o atemperar los ajustes. Para evitar los aumentos, tendrán que registrar una baja en el consumo superior al 20% con respecto al mismo bimestre de 2013. En tanto, aquellos que logren “ahorrar” entre un 5% y 20% afrontarán sólo la mitad de las subas programadas hasta agosto.

Mediante ocho resoluciones del Enargas, el Gobierno aprobó los cuadros tarifarios para los usuarios residenciales que incluyen los nuevos precios del combustible según los niveles de consumo y una actualización de los ingresos que irá a parar a las distribuidoras y transportadoras.

El precio del gas para el 27% de los hogares de la región metropolitana que integran la categoría más baja (R1) saltará de $ 0,166 por metro cúbico a $ 0,298 en agosto si bajan el consumo entre 5% y 20%. Si no “ahorran”, el valor del gas será de $ 0,429.

Para los R2-3 (entre 801 y 1000 metros cúbicos anuales), el gas pasará de $ 0,193 a $ 0,377 si logran consumir entre 5% y 20% menos y a $ 0,561 si siguen demandado lo mismo que el año pasado. Y en la categoría más alta (R 3-4), el aumento del gas será del 247% si consiguen achicar el consumo entre un 5% y 20% y del 494% si no llegan a “ahorrar” un mínimo del 5%.

Además, los cargos fijos y las facturas mínimas aumentarán hasta un 37% entre abril y agosto.

El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, argumentó esta mañana que "el impacto" en el incremento de la tarifa de gas "dependerá de la racionalidad en su uso", por lo que concluyó que "cuanto más ahorro" haya, "más" se mantendrá el subsidio.