Axel Kicillof trazó un crudo panorama sobre la pandemia en la provincia de Buenos Aires y habló de una "estabilidad tremendamente frágil" y la consolidación de una tendencia creciente de los contagios.

El Gobernador brindo esta mañana en el Salón Dorado de la Casa de Gobierno un informe epidemiológico luego que Alberto Fernández anunciara el viernes una nueva extensión de la cuarentena hasta el 20 de septiembre.

Kicillof fue categórico respecto de las medidas de aislamiento y la posibilidad de nuevas aperturas de actividades. "Hay que tomar decisiones porque están creciendo los casos", dijo rechazó de plano mayores aperturas en la cuarentena como exigen en público intendentes de la oposición y en privado intendentes del peronismo.

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"Es un error abrir de más", dijo Kicillof y reiteró: "eso es un error. No podemos acompañar más aperturas. No podemos arriesgar a perder en cinco días lo que logramos en cinco meses". Además explicó que el sistema de salud no explotó pero está en un porcentaje de ocupación del 66%.

Así, Kicillof ratificó lo que ya desde La Plata había dejado trascender el viernes: que en la provincia no se habilitarán las reuniones al aire libre de un máximo de 10 personas, permiso que quedó establecido para todo el país este lunes en el decreto presidencial que extiende el aislamiento.

Durante todo su discurso -y también durante las respuestas a las preguntas de la prensa- Kicillof evitó confrontar con el jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta. Incluso arrancó su intervención planteando la necesidad de enviar un mensaje de "unidad" al pueblo de la provincia y planteó que "no estamos en un año electoral, estamos en un año de pandemia".

Quizás una muestra de esa unidad que intentó reflejar quedó plasmada en los invitados: Los intendentes del Frente de Todos: Martín Insaurralde, Mayra Mendoza y Juan Zabaleta. Y sus pares de Cambiemos, Julio Garro y Néstor Grindetti.

Al punto llegó esa ponderación de unidad que desde La Plata dejaron trascender un chat entre el Gobernador y el jefe de Gobierno:

-"¿Viste los títulos de algunos portales? Nos quieren hacer pelear todas las semanas", escribió el ex ministro.

-"Quedate tranquilo que no hay chance de que nos hagan pelear. Aunque pensemos diferente en algunas cosas nunca dudo de tu buena intención", respondió Horacio.

Rodeado de intendentes oficialistas y opositores, Kicillof llamó a seguir trabajando unidos: no es año electoral, es año de pandemia.

Elisa Estenssoro y Axel Kicillof.

Aglaplata

Kicillof explicó que en los últimos dos días los contagios empezaron a crecer y que ahora pueden ver que esa tendencia se consolidó. Además actualizó la progresión de contagios hacia el interior bonaerense que pasó de tener en julio el 5% de los contagios de la provincia a tener el 11%.

En ese extenso interior bonaerense existen 1 contagio cada 250 habitantes. Le sigue el conurbano con 1 caso cada 60 habitantes y luego la Ciudad de Buenos Aires con 1 contagio cada 30 habitantes.

Consultado sobre los nuevos permisos en la Ciudad, sostuvo que "el problema no está puntualmente en ninguna de esas actividades, que con los protocolos pueden no ser tan contagiosas", en referencia a la apertura de bares y restaurantes con mesas al aire libre, pero consideró que las actividades "se van sumando y van generando simbólicamente la imagen de esto ya pasó, cuando en realidad nada pasó". Y añadió: "En la provincia creemos que hay que tener más cautela".