Luego de innumerables idas y vueltas en las negociaciones entre el grupo Vila y Nahuel Caputto, dueño del diario El Litoral, por la venta del multimedio La Capital de Rosario, la operación volvió a punto muerto el lunes pasado cuando se conoció el nuevo decreto que firmó Macri sobre el canje de deuda.

Ese día, el Boletín Oficial daba cuenta de la prohibición de cambiar deuda impositiva por pauta oficial, una medida que había tenido como uno de los principales beneficiarios al Grupo América.

Si bien en el decreto se establece que rige "para adelante", según detallaron fuentes del Gobierno a LPO, también alcanza a los medios que estaban en trámite y aún no habían sido otorgados.

Tal sería el caso del multimedio La Capital que comprende el diario rosarino y tres frecuencias radiales: LT8, La Red Rosario y Estación del Siglo que según fuentes al tanto de las negociaciones "tienen una cifra muy importante de deuda con el Estado".

El Gobierno da de baja el canje de publicidad por aportes para los medios

Es por ello que con el flamante decreto presidencial, los compradores pusieron el freno de mano a las negociaciones ya que las condiciones cambiarían radicalmente ya que una cosa es contar con la posibilidad de canjear la deuda fiscal por publicidad y otra muy distinta es que el nuevo titular tenga que afrontar la deuda con capital propio.

Si bien, los montos de la venta se desconocen, se calcula que rondan entre los 15 a 20 millones de dólares mientras que la deuda a la AFIP que sumarían alrededor de los diez millones en moneda estadounidense, representando casi la mitad de los activos.

Además, la ley sobre papel prensa que se acaba de aprobar en sesiones extraordinarias también puso un manto de incertidumbre ya que si bien, Nahuel Caputto tiene estrechos vínculos con Clarín, sus socios temen que en un futuro haya problemas para el abastecimiento del principal insumo.

Por ahora, el acuerdo volvió a punto muerto y según pudo conocer LPO, uno de los socios capitalistas que no está entrenado para la particular arena de las empresas de medios lo considera caído: "la negociación estalló por los aires" afirmó.

Sin embargo, las partes están manteniendo reuniones contra reloj con las más altas autoridades nacionales para destrabar la situación y encontrar un cauce que garantice la operación.