Parecía evidente, pero faltaba la confirmación. La renuncia de Margarita Zavala la dejó oficialmente sin chances de pelear la postulacion por el Frente Ciudadano. Así con anunció oficialmente Damián Zepeda, secretario general del CEN panista, en una entrevista radiofónica.

Las chances estaban abiertas jurídicamente. De hecho, como había adelantado LPO, esa misma ruta se había trazado Miguel Ángel Mancera, que pensaba tomarse licencia a finales de septiembre para poder encarar una gira nacional con la excusa de juntar las 900 mil firmas que exige el INE para los candidatos independientes.

Así, los asesores del Jefe de Gobierno -encabezado por Héctor Serrano, su cerebro electoral- apostaban por levantar el perfil, aprovechando los tiempos que las leyes le entregan a los postulantes que no están afiliados a partidos. Pero eso de ninguna manera significaba que Mancera no jugaría en el Frente. Al contrario: hacia fines de año, cuando se habra el proceso formal de selección de candidatos, estaría mejor posicionado.

Esa posible ruta abría la incógnita para Margarita. Pero desde Ricardo Anaya ya le cerró cualquier oportunidad de seguir en el Frente. "En el pan no sería procesable que una persona que renunció a las filas del partido sea candidato, con o sin frente. El Frente Ciudadano por México lo conforman tres partidos, pero esa es la opinión de nuestro partido", sentenció Zepeda.

"Margarita tenía dos años insinuando esto. Desde el 2015 decía esto y nosotros recién íbamos entrando a la dirigencia del PAN. Así que la acusación es absurda. Ella ya decía que con o sin el PAN estaría en la boleta", agregó el colaborador de Anaya, quien volvió a meter el dedo en la llaga al acusarla de beneficiar al PRI.

"Siempre me quedó claro que desde el CEN del PAN sólo trabajaban para la candidatura de Anaya. Un jefe que no apuesta a la unidad y al diálogo, sino a la división... Lo mío no es causa sino consecuencia de una división, que de manera irresponsable causó Anaya", respondió unos minutos más tarda la ex primera dama.