El presidente Andrés Manuel López Obrador supervisó los avances del acueducto El Cuchillo II en conjunto de autoridades federales y el Gobernador de Nuevo León Samuel García. Estima que la obra entre en funcionamiento en septiembre.

Pasadas las 16:00 horas, el Mandatario arribó a Cadereyta y fue recibido por autoridades locales. Supervisó la planta de bombeo y aseguró que se encuentran en un 70%; espera que ya pueda distribuir el vital líquido en septiembre.

Su llegada se dio ante el resguardo de decenas de elementos de la Guardia Nacional en un helicóptero militar, luego de su corta gira en Coahuila. Tras unos minutos de caminata por la obra con autoridades, sobrevoló la zona de la obra.

"Se está trabajando, las empresas están cumpliendo, hay un avance del 70 por ciento de la obra completa", se limitó a decir en su salida e informó que no visitará la Presa Libertad, otra obra hidráulica federal en Nuevo León.

En el lugar no prevaleció ni una hora cuando justo a las 17:00 horas el Presidente de la República abandonó la construcción del acueducto. Pese a la invitación de supervisar otras obras federales optó por retirarse.

El acueducto El Cuchillo II cuenta con un diámetro de 2.13 metros y una longitud de 93 kilómetros y estima que distribuirá hasta 5,000 metros cúbicos por segundo de agua potable, esto ante la crisis del vital líquido que sufrió la entidad el año anterior.

Además del Presidente y el Gobernador, también estuvieron presentes el Secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval; y el director general de Conagua, Germán Martínez Santoyo.