Un pleito encarnizado se ha desatado tras el anuncio de la dirigencia nacional del candidato del PAN al gobierno de Coahuila, cargo al que todos esperaban que llegara el senador Luis Fernando Salazar, quien fue destapado y promovido por al menos cuatro gobernadores: Francisco Javier García Cabeza de Vaca (de Tamaulipas), Miguel Ángel Yunes (de Veracruz), Martín Orozco (de Aguascalientes), Carlos Mendoza Davis (de Baja California Sur), y José Rosas Aispuro (de Durango), quienes en diciembre grabaron videomensajes expresando su visto bueno por la candidatura del coahuilense.

"Soy respetuoso del proceso interno pero soy amigo de Luis Fernando Salazar y me solidarizó con él", dijo hoy el gobernador Rosas Aispuro.

Sin embargo, en el CEN del PAN no opinan lo mismo. Hay una prioridad mayor que la de mantener la concordia en su partido. Los jefes nacionales del Sol Azteca y Acción Nacional tienen especial interés en que no se complique la alianza entre ambos partidos en los comicios de Coahuila y Nayarit, como está sucediendo en el Estado de México. 

Así, mañana en punto de las 17:00 horas, la Comisión Permanente Nacional del PAN se reunirá para hacer oficial la designación de Guillermo Anaya Llamas como candidato por Coahuila, célebre compadre de Felipe Calderón y Margarita Zavala, y a quien se liga con los Moreira.

"El dilema para Anaya -dice a LPO un militante cercano al entorno del líder blanquiazul- es que Fernando tiene el apoyo de las bases del partido en el estado, además del apoyo de parte de sus compañeros senadores y también el de algunos gobernadores, pero Guillermo Anaya posee el control político local que le dejó ser el compadre del entonces presidente Felipe Calderón". Por lo que puede asegurarse que el dirigente nacional de Acción Nacional no previó un escenario de encono público como éste.

Coahuila necesita un candidato valiente que no pacte con quienes llevaron al estado a las condiciones en las que se encuentra.

"Coahuila necesita un candidato valiente -se lee en una carta pública que enviaron 2 mil militantes panistas (ciudadanos y empresarios) a la dirigencia nacional-, que no pacte con quienes llevaron al estado a las condiciones en las que se encuentra, y que de manera frontal acabe con la impunidad; cualidades con las que cuenta Luis Fernando Salazar. Este es el momento de comprometernos para cambiar", dice la misiva de respaldo al senador.

Agustín Basave y Ricardo Anaya en una foto de 2016

Cuartoscuro

La disputa interna y el pacto con el PRD

“Este no ha sido el caso en los últimos comicios del partido en Coahuila donde en vez de eso, ha existido una farsa en la que se han seguido una serie de reglas que han imposibilitado la competencia entre los candidatos, y le han dado preferencia a una encuesta que ha estado manipulada para favorecer a un candidato. 

"En este momento de desestabilización y cuestionamiento de las clases políticas resulta absurdo que tengamos un proceso tan turbio y cuestionado”, declaró a su vez Luis Fernando Salazar este fin de semana luego de saber que Anaya Llamas tenía la postulación en sus manos, con la firma de una carta con los nombres de cuatro de los cinco candidatos a la gubernatura: Silvia Garza, Isidro López y Marcelo Torres, abalando el trunfo del compadre de los Calderón, quien signó al final de la misiva.

Al parecer, "Luis Fernando Salazar hasta ahora no confirmó a Anaya Cortés si aceptaría una coalición" con el PRD, comenta la militancia panista a LPO. Por ello, el dirigente de Acción Nacional prefirió al compadre del ex presidente, quien garantizó la unión con el PRD, cuya plataforma electoral es casi inexistente en el estado y quedará subordinada a las decisiones centrales del blanquiazul, si derrotan a uno de las entidades emblemáticas del tricolor, pues hasta hoy -como en el Estado de México- no ha conocido la alternancia política.

Salazar no confirmó a Anaya si aceptaría una coalición con el PRD. Por ello, el dirigente de Acción Nacional prefirió al compadre de Calderón.

Además de la gubernatura, habrá comicios en 38 ayuntamientos y 25 diputaciones, por lo que distinguidos panistas -incluidos calderonistas de la talla de Roberto Gil Zuarth y Ernesto Cordero- aseguran que si no es Luis Fernando Salazar, se perderán los comicios en Coahuila, un estado que no ha conocido la alternancia política y sólo ha vivido los trágicos priistas que en recientes fechas los han personificado Rubén y Humberto Moreira, que en más de una ocasión han estado en la mira de la policía.