2022 se perfila para ser uno de los mejores años en materia de recepción de inversión extranjera directa (IED). Es un dato que causa optimismo en Palacio Nacional, pero que si se analiza con más detalle, hay aspectos que deben leerse con cuidado, en especial, cuando se analiza el avance de esta administración en manera de reducir las brechas de desigualdad en las regiones.

En un cálculo de Citibanamex, la IED total de este año se perfila para superar los 37 mil millones de dólares, siendo su mejor año en casi diez años, aunque hay detalles. Uno de ellos es que este fuerte incremento se explica principalmente por dos operaciones atípicas en el primer trimestre: la fusión de Televisa con Univisión y la reestructura de Aeroméxico, que por sí solas sumaron casi 7 mil millones de dólares. En ese sentido resaltan que no necesariamente se reflejan en una mejora de la capacidad de producción del país.

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Pero otro elemento a llamar la atención es que la inversión que está llegando no se estrá distribuyendo por todas las regiones del país, sino que sigue concentrada en los lugares típicos: el norte y el bajío del país, así como el norte. Sin embargo, hacia el sur no se ha logrado revertir la falta de inversión extranjera, más allá de los esfuerzos que ha hecho esta administración para construir Dos Bocas, el Tren Maya y el proyecto Transístmico.

Sin embargo, en opinión de Iván Arias, analista de Citibanamex, estos proyectos si bien han generado dinamismo en las entidades donde atraviesan estos proyectos, no han generado nuevas inversiones desde el sector privado y mira con escepticismo su capacidad para lograrlo en el mediano y largo plazo.

Otro elemento que se evalúa es en materia de nearshoring. Luego del conflicto comercial entre China y Estados Unidos, especialistas consideraron que México tendría una gran oportunidad en materia de las decisiones que empresas internacionales tomarían para relocalizar sus plantas, sin embargo, también hay críticas de que éste elemento no se ha aprovechado plenamente.

"Uno pensaría que, si las empresas se trasladaran a México a gran escala, sería para obtener acceso a un gran centro de consumo como Estados Unidos. Sin embargo, considerando las importaciones totales de Estados Unidos por país, México sólo ha ganado alrededor de 0.4 puntos porcentuales de participación de mercado entre 2018 y 2022", señaló Citibanamex en un documento de análisis.

Para Ignacio Martínez, coordinador del LACEN de la UNAM, este diferencial persiste porque las oportunidades no se han igualado entre las regiones para los empresarios, como lo es en temas de infraestructura, conectividad, etc; además de las características propias de las regiones, como la cultura laboral o la cuestión lingüística. Son aspectos que no han logrado emparejarse, señala, por lo cual, augura que esta administración, "va a terminar con una desigualdad más profunda regional".

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De manera general, Arias señala, por su parte, que hay factores que han generado también incertidumbre, por ejemplo, las polémicas con Estados Unidos en materia energética, un elemento que los expertos consideran clave para atraer más inversiones.

En ese sentido, Citibanamex señala: "Tal vez para 2024, una vez que las perspectivas globales parezcan más favorables y suponiendo que las incertidumbres de carácter político disminuyan con una nueva administración, México podría estar mejor posicionado para aprovechar las oportunidades de nearshoring", aseguró.