El escenario para la oposición no está fácil. Morena arrasó de punta a punta en la pasada elección, generando mayorías cómodas. Es el caso del primero Congreso de la Ciudad de México, en donde el partido de Andrés Manuel López Obrador contará con 37 de los 66 diputados locales, esto sin contar los 3 del PT, los 2 del Verde -que ya vuelve a su tradicional rol de satélite oficialista- y 1 del PES. 

Quiere decir que Claudia Sheinbaum contará con una mayoría muy cómoda para sacar las iniciativas que vaya enviando a la Antigua Asamblea Legislativa, en donde tendrán un rol clave Ernestina Godoy y su vice Eduardo Santillán. 

En los últimos días, según pudo saber LPO, Tonatiuh González, uno de los liderazgos del PRI en el Congreso de la Ciudad, se acercó a Mauricio Tabe, el coordinador panista. El reflejo del hombre tricolor -histórico allegado a Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre- fue plantear una alianza legislativa de oposición a Sheinbaum.

Es la misma lógica que se aplicó en el pasado trienio, cuando el PRD selló un pacto con PRI y PAN para mayoritear a Morena, que ya venía en franco crecimiento en la Ciudad. "La gran diferencia es que ahora Morena tiene un mayoría propia, ni sumando a todos los demás se consigue superarlos", fue la respuesta que encontró en su interlocutor.

En el PAN de la Ciudad saben que tienen la chance de consolidarse como la segunda fuerza capitalino, marcando una oposición férrea. Algo similar al planteo que hace Marko Cortés en el plano nacional. "Pero si arrancamos con alianzas que nos desdibujen y encima sumando votos que de todos modos no nos darían mayoría, estaríamos por el mal camino", es el razonamiento que hacen en la sede de Durango, donde en pocas semanas más desembarcará Andrés Atayde.