En el spring final de la carrera por la intendencia de Córdoba, MartÃn Llaryora encabezó una maratón de llamados telefónicos del que participaron 1.000 funcionarios provinciales y municipales, una estrategia con la que intentó darle el envión final a Daniel Passerini, el candidato del oficialismo para retener la Municipalidad de Córdoba, acechada por Rodrigo de Loredo, quien lidera las encuestas desde hace meses.
Enfundando en un jogging azul, Llaryora reunió a su tropa en la sede del club Instituto, en Alta Córdoba. AllÃ, divididos en grupos, el gobernador electo dio la orden de que cada uno llame por teléfono a por lo menos 20 personas que "no pertenezcan a la polÃtica".
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"Nadie se podÃa ir hasta no completar el listado de llamadas", contó un funcionario de segunda lÃnea. Luego, cada grupo pasó a una sala donde recibieron la última arenga de Llaryora y Passerini. "Nos quedó claro que si perdemos la intendencia es por culpa nuestra", agregó otro funcionario que dedicó la tarde del viernes al call center.
Participaron todos los funcionarios municipales y la inmensa mayorÃa de los provinciales, incluyendo a actuales y futuros ministros. Los destinatarios fueron empresarios de distintos rubros, muchos de ellos proveedores del Estado, pero también amigos y familiares. La única consigna fue que "no estén en la rosca". Se trata de un disparo al corazón del ABC1 cordobés, el sector socioeconómico donde Rodrigo de Loredo espera hacer su mayor diferencia el próximo domingo.
Llaryora sólo abandonó el club de Instituto para correr hasta el Palacio 6 de Julio y firmar el decreto por el cual se puso en marcha el narcotest obligatorio para funcionarios municipales, una ordenanza que fue sancionada por el Concejo Deliberante en mayo. Cuando regresó, mantuvo reuniones reducidas y pidió a sus funcionarios 48 horas de trabajo intenso por cuatro años más de poder.
En los barrios populares, es decir los sectores de la ciudad que hicieron gobernador a Llaryora, el peronismo desplegó todo su aparato. En el cierre de su campaña, De Loredo advirtió que se habÃa puesto en marcha en las últimas horas "una maquinaria clientelar". En su equipo aseguran que, de acuerdo con las encuestas que reciben, se mantiene el tope de las preferencias electorales de los cordobeses.
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Preparense cada día en ver gobiernos de coalición con peronistas, radicales y del pro sentados juntos en un lado y otro de la grieta...
Cuyas cosas que los unen son la izquierda y la derecha, y juntarse par derrotar al otro...