El senador cordobés Luis Juez asumió finalmente este lunes su banca como consejero de la Magistratura, luego del fallo de la Corte Suprema que le diera la razón en su reclamo contra Martín Doñate, a quien el kirchnerismo había tratado de imponer en representación del Senado.

La jura del legislador macrista fue encabezada por el presidente del máximo tribunal, Horacio Rosatti, en el Salón Bermejo del palacio de la calle Talcahuano y consumó una nueva derrota del kirchnerismo en su batalla contra el Poder Judicial. Reconfigurado bajo el sello de Unión por la Patria, su bloque se recorta ahora a cinco miembros sobre un total de 19, con Vanesa Siley en representación de Diputados, Mariano Recalde y María Inés Pilatti Vergara por la Cámara Alta, y Héctor Recalde por los abogados.

También asistieron a la ceremonia los supremos Carlos Ronsenkrantz, Ricardo Lorenzetti y Juan Carlos Maqueda. El cambio de gobierno y la integración actual impiden todavía saber hacia dónde marchará la agenda del Consejo. Por caso, el abogado Miguel Piedecasas tuiteó que le desea "el mayor de los éxitos en su gestión" a Juez, mientras que otro de los consejeros admitió ante este medio que no tenía "ni idea" sobre el nuevo rumbo.

Con el ingreso de Juez, el Consejo completa la composición originaria, la que repuso la Corte Suprema al derribar la ley impulsada por Cristina Kirchner en 2005 para engrosar la representación del sector político en el cuerpo que designa y destituye jueces. Asimismo, los magistrados también dispusieron que la Presidencia del Consejo recayera en el titular de Tribunales, tema que fuera discutido por el gobierno anterior y que formulara como causal del juicio político que tramitó durante este año en la Cámara de Diputados.

La jura de Luis Juez fue encabezada por el presidente del máximo tribunal, Horacio Rosatti, en el Salón Bermejo del palacio de la calle Talcahuano y consumó una nueva derrota del kirchnerismo en su batalla contra el Poder Judicial. 

Aquel pronunciamiento de la Corte, fechado el 16 de diciembre de 2021, establecía un plazo de cuatro meses para que el Congreso discutiera una nueva ley, ampliando y equilibrando la cantidad de miembros del Consejo. Legisladores aliados al peronismo estaban dispuestos a apoyar una reforma a la ley kirchnerista porque también se oponían a que Rosatti presidiera la Corte y la Magistratura al mismo tiempo, pero la ex Vicepresidenta y sus principales espadas parlamentarias obstruyeron ese camino o, cuanto menos, no movieron los hilos con eficacia para evitar que entrara en vigencia la normativa que regía el cuerpo en 1998.

"Cuando Magistratura llega a la Corte, el kirchnerismo tenía mayoría en el Consejo pero desperdició su tiempo atacando a Bruglia y Bertuzzi, ahora esos dos jueces se suceden en la presidencia de la Cámara Federal porteña", expresó una fuente judicial.

El pleito con Juez se desató porque, vencido el plazo de la Corte para sancionar una nueva ley del Congreso, el FdT subdividió su bloque en el Senado, dejando un puñado de legisladores bajo la conducción del formoseño José Mayans y creando otro bloque bajo el nombre de Unidad Ciudadana y la jefatura de Juliana di Tullio. Así, buscó quedarse con los dos senadores por la mayoría y uno por la segunda minoría, librando el cuarto a Juntos por el Cambio.

Juez tramitó entonces un amparo para reclamar su lugar, impugnando el ardid parlamentario de sus rivales. En primera instancia, la Justicia había rechazado el planteo del senador cordobés porque consideró que no era materia suya opinar o intervenir sobre la conformación de los bloques parlamentarios.

El litigio escaló hasta la Corte y los ministros le dieron la razón a Juez el pasado 7 de diciembre, con el voto favorable de Rosatti, Rosenkrantz y Maqueda.