La maniobra del kirchenrismo para quedarse con el juzgado electoral de Blanco
El último paro nacional no freno a los integrantes delConsejo de la Magistratura que decidieron no postergar el plenario a pesar quefaltaban horas para la medida de fuerza sindical. Así, en una sesión de pocosminutos, desestimaron denuncias que pesaban sobre casi una treintena de jueces.La maniobra no podía postergarse toda vez que sus consecuencias tendrían unefecto inmediato en las codiciadas vacantes de los juzgados federales de LaPlata.
Ese día, mientras en el gobierno negociaban paracontrarrestar el efecto de la medida de fuerza sindical, La Cámpora en el Consejosellaba un acuerdo con la parte opositora que le permitirá al kirchnerismocontrolar la justicia electoral bonaerense.
Se sabe que el gobierno nacional intenta encontrarresquicios desde donde controlar el juzgado federal 1. El objetivo que desvela aintegrantes del kirchnerismo es poder controlar la competencia electoral queposee ese Juzgado. Desde allí se controlan las listas, los comicios y losresultados de todas las elecciones en la provincia más importante del país entérminos electorales.
La idea apuntaba a ubicar en el Juzgado 3 -vacante desde larenuncia de Arnaldo Corazza y subrogado por Blanco- al secretario federal, Jorge Di Lorenzo. Sabíanque si controlaban ese juzgado, sólo era cuestión de tiempo para podercontrolar el 1.
Sucede que los juzgados se subrogan en un mecanismopares/impares. Esto es que en caso de faltar el juez del Juzgado 1 se harácargo el magistrado del Juzgado 3, y viceversa. Lo mismo sucede con losJuzgados 2 y 4, se subrogan entre si.
Por eso, el kirchnerismo apostaba a controlar el 3, sabíanque a futuro terminarían desembarcando en el 1, que tiene la competenciaelectoral. A esto se sumaba que todo el ámbito judicial sabía de la enfermedadque padecía el juez Manuel Blanco, titular del juzgado 1.
Por eso, el apuro de los consejeros la semana pasada paradesestimarle denuncias que pesaban sobre jueces de la lista Bordó, muy críticadel gobierno.
Lo curioso de la maniobra fue que los consejeroskirchneristas acordaron archivar una denuncia contra Alejandro Sánchez Freytes(integrante de La Bordó), denunciado por la presidenta de Abuelas de Plaza deMayo, Estela Carlotto, por haber informado “el apellido de un joven cuyaidentidad se investiga para intentar determinar si es hijo de desaparecidos”.
También fue archivada sin cuestionamientos otra denuncia quepesaba sobre otro juez opositor dentro del Consejo. Se trata de Ricardo Recondo,que también llegó al organismo por la Bordó.
Luz verde para LemosArias
Claro, la limpieza de esos puntos oscuros en los expedientesde los jueces opositores no fue gratuita. En ese mismo plenario del Consejo, elkirchnerismo logró designar a Roberto Lemos Arias como juez subrogante de laCámara Federal de La Plata.
Como adelantó LPO, Lemos Arias fue acusado en 2004 por laAsociación de Abogados de Buenos Aires por elsupuesto delito de usurpación de títulos y honores. El funcionario judicialse desempeñaba como prosecretario letrado del Jurado de Enjuiciamiento y a lavez prestaba servicios como prosecretario en la vocalía del fallecido SergioDugo en la cámara federal de La Plata.
Había sido propuesto por Mario Fera, el juez que ingresó porla lista Celeste e integrante de Justicia Legítima. Su designación generabacontroversias dentro del Consejo y la votación se venía postergando. Sinembargo, todo se destrabó después de pasar al archivo las denuncias que caíansobre los jueces que integran el propio organismo.
Así, hubo humo blanco en el Consejo y la votación de decidiósólo con los votos en contra de los abogados Daniel Ostropolsky y AlejandroFargosi; y los legisladores opositores Oscar Aguad y Mario Cimadevilla.
La muerte de Blanco
Claro que seis días más tarde fallecía en La Plata el JuezBlanco y se abría un nuevo capítulo en la batalla por el control de la justiciaelectoral. Los actores más importantes del mundo judicial estuvieron presenteen las exequias del magistrado.
Entre saludos formales, uno de los temas de conversación enel funeral fue el voto de Sánchez Freytes y Recondo a favor de la subroganciade Lemos Arias. Blanco era un crítico del kirchenrismo e integrante de LaBordó, sus vínculos dentro de la Justicia Federal no ocultaban su malestar conla decisión de los jueces.
Ahora, tras el logro de la Cámara Federal, el kirchnerismotiene la base para los acuerdos necesarios que le permitan controlar el juzgado1 y -claro- la competencia electoral.
Rápido de reflejos, desde el Consejo de la Magistraturaconvocaron a un nuevo plenario para el próximo jueves. El orden del día, ya publicado en la web oficial del PoderJudicial, fija en el último punto la designación de subrogantes en losjuzgados 1 y 3 de La Plata. La maniobra -al menos por ahora- parececonsolidada.