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El riesgo país perforó los 800 puntos y está en el máximo valor en cuatro años

Cerró en 804 puntos. Se incrementa la desconfianza sobre Argentina, a pesar del retroceso del dólar y la nueva absorción de pesos vía Leliq.

El riesgo país no afloja su marcha ascendente y este jueves marca un nuevo récord al llegar a los 804 puntos básicos, lo que representa el valor más alto en los últimos cuatro años.

De hecho, el acuerdo con el FMI y sus respectivos desembolsos no cumplieron el efecto tranquilizador esperado y en los últimos 45 días este índice se incrementó en más de 200 puntos básicos, reflejando la poca confianza en la economía argentina.

"Fundamentalmente responde a la ausencia de un horizonte político en un contexto de una economía que es altamente vulnerable producto de los elevados niveles de endeudamiento", indicó a este medio el director de FyE Consult, Hernán Hirsch.

"Al no tener ancla y ver candidatos presidenciales que proponen incluso la reestructuración, hace que se te deprima la demanda de activos domésticos con la consecuente caída de bonos y acciones, lo que termina llevando el riesgo país a estos niveles", agregó el economista.

Sucede que el debate sobre la capacidad de pago argentina ya entró de lleno en todo el arco político, y desde Melconian hasta el kirchnerismo, pasando por economistas cercanos al socialismo y sectores empresarios como la UIA, se refirieron a la temática en los últimos días, generando más incertidumbre.

A su vez, en el mercado manifiestan que desde el lado de las cuentas públicas no hay buenos resultados para mostrar e incluso muchos dudan del cumplimiento de las metas fiscales.

"La Argentina aún no tiene noticias alentadoras para dar. Desde las cuentas fiscales y externas puede mostrar que se hizo el ajuste, aunque por las malas. Se está reduciendo el déficit con mayor presión impositiva, mientras que las cuentas externas empiezan a ajustarse por caída de importaciones y recién el mes pasado reaccionaron las exportaciones", subrayó el economista y miembro del Centro de Estudios Económicos del Sur, Amilcar Collante.

Ante este escenario, las tasa de interés volvió a mostrar un avance, reflejando el alto precio que está pagando el Banco Central para poder tener estabilidad cambiaria, lo que retroalimenta las dudas en el ámbito político por el consecuente freno que ocasiona en el nivel de actividad.

En una nueva subasta de Leliq, la máxima autoridad monetaria adjudicó $91.487 millones a una tasa promedio de corte de 59,58%, 13 puntos básicos por encima de la rueda anterior. De esta manera, logró absorber $8.797 millones y ayudó a que el tipo de cambio retroceda unos 28 centavos para cerrar a $39,05.

En el segmento mayorista, por su parte, terminó operando a $38,05 con un volumen negociado de 637,9 millones de dólares en contado y 18 millones en futuros MAE.

En tanto, el Merval arrojó una baja del 2,19% -con las firmas energéticas liderando el panel rojo-, mientras que en los ADR's de las empresas argentinas en Wall Street, se registraron caídas de hasta el 5,7%.