Reforma jubilatoria

Molestos, los gobernadores se preguntan si manda Macri o Carrió

Dicen que debilitó el acuerdo por la reforma. Y después dinamitó el DNU, que tenía el aval de los gobernadores.

Los gobernadores peronistas están molestos por el rol de Elisa Carrió en la discusión por la reforma jubilatoria y ya se preguntan si en la Casa Rosada manda ella o Mauricio Macri, luego de que la líder de la Coalición Cívica complicó la previa de la sesión con las críticas al proyecto y más tarde dinamitó el DNU, que tenía el aval de las provincias.

El Gobierno activará este mediodía el operativo para lograr el apoyo político de los gobernadores, pero el escenario todavía es complejo, según supo LPO. Entre los diputados del interbloque Argentina Federal persiste el rechazo a la reforma y hay dudas sobre sesionar el lunes, como pretende la Rosada.

"Es un error tirar una fecha de sesión sin habernos sentado a hablar. Creo qué hay que que ver qué propuesta tiene el gobierno que es a la que hizo referencia Carrió y qué iba a decir el DNU y recién ver lo de la sesión", dijeron a este medio desde el bloque.

La reunión convocada de urgencia se realizará a las 13.30 en el Congreso y la encabezarán Marcos Peña y Rogelio Frigerio, que anoche comenzó los contactos con los gobernados y fue quien más empujó la salida política. Mauricio Macri no irá a la Casa de Gobierno, y antes recibirá a su círculo íntimo en Olivos.

Lo que no está confirmado es cuántos gobernadores peronistas llegarán a la Rosada, y se especula con una asistencia módica. Los confirmados serían Gustavo Bordet, Domingo Peppo, Juan Manuel Urtubey y Carlos Verna. Los últimos dos no aportaron a sus diputados para el quórum. Los contactos con el resto de los mandatarios seguirían el fin de semana.

El clima no será el ideal. A la bronca de la Rosada con los gobernadores por el casi nulo apoyo de sus diputados, se le suma el fastidio que generó entre los mandatarios la actitud de Carrió.

La bronca es porque primero Lilita criticó la semana pasada el proyecto y puso en duda el voto de la Coalición Cívica. Los gobernadores lo habían firmado con Macri, luego lo empujaron en el Senado y nada hacía parecer que corría riesgo en Diputados. Hasta que aparecieron las dudas dentro del oficialismo y algunos peronistas que no estaban convencidos aprovecharon para directamente rechazarlo. Fue el caso de los tres salteños, que a pesar del apoyo de Urtubey ninguno bajó a dar quórum.

"Carrio debilita la posición de los gobernadores, debilitó el acuerdo", dijo a LPO una fuente del peronismo, que agregó que en esas condiciones se les hace muy difícil mantener los acuerdos, a pesar de las reuniones que mantengan con Macri o Peña.

A las críticas de la previa, Carrió le sumó que decidió casi unilateralmente levantar la sesión (a pesar de que algunos integrantes de Cambiemos querían seguir) tras una sugestiva charla con el camporista Andrés "Cuervo" Larroque, y cuando todavía había algún camino para continuar (como el llamado a un cuarto intermedio) si es que efectivamente habían llegado al quórum.

Kosiner habla en la fallida sesión de este jueves con Camaño y Massot.

El combo lo completó horas después, cuando dinamitó el decreto que preparaba Macri para sacar la reforma. El DNU tenía la firma de todos los ministros y además la Rosada ya se había asegurado el compromiso (tras una exigencia directa) de algunos gobernadores peronistas para salir a avalarlo públicamente. Para los mandatarios provinciales era un alivio porque no tenían que mandar a sus diputados a levantar la mano, y el costo político corría por cuenta de Macri.

Pero otra vez apareció Carrió y con un tuit volteó el DNU. "¿El gobierno es Macri o es Carrió?", dicen molestos. "Al final los gobernadores quedamos como los socios del ajuste y ella que es parte central de Cambiemos queda como la que salva a los jubilados y les consigue el bono", se quejan.

Se trata de una actitud que se repite (pasó cuando Pichetto y Massa habían acordado la reforma del Ministerio Público Fiscal) y en el justicialismo lo ven como el problema más grave para sellar acuerdos con el Gobierno.

En la Rosada lo saben y no niegan que hay un problema serio con Carrió, que ayer se habría cruzado feo con un integrante importante del Gobierno. Y hasta se habla que ya está casi afuera del oficialismo.