Elecciones 2017

Saredi calienta la interna de Cambiemos porque no lo dejan polarizar con Magario

El candidato de La Matanza provoca a Finocchiaro al sumar peronistas y confronta con los "PRO puros".

El candidato de Cambiemos en La Matanza, Miguel Saredi, comenzó a meter tensión en la interna de su espacio porque quiere salir a confrontar de modo directo con la intendenta Verónica Magario, mientras en el comando de campaña macrista prefieren nacionalizar la campaña y obligarlo a mantener un perfil bajo.  

Como contó LPO, el propio Saredi se sorprendió con los resultados de una elección mejor a la que esperaba en las PASO. Dejó bastante atrás al massismo -que creían podía salir segundo- e incluso marcó una diferencia con su boleta: sacó 194.734, contra 178.341 de Graciela Ocaña y 177.770 de Esteban Bullrich.

Saredi está convencido de que la ventaja que logró es por ser la única figura conocida de Cambiemos en La Matanza y quiere salir a polarizar contra Magario -que va como candidata testimonial y encabeza su boleta- para darle un tinte local a la elección que lo reinstale de cara a 2019. 

Sin embargo, los planes de la dirigencia de Cambiemos respecto a La Matanza son otros. No quieren que Saredi quede instalado para disputar la intendencia, sino que la decisión oficial es que el liderazgo macrista en el municipio quede a cargo del ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro. 

Mientras tanto, Saredi dice de que puede disputarle votos peronistas a Magario pero no a Cristina Kirchner y por eso dice que es errada la decisión de "nacionalizar" la campaña sin tener en cuenta el peso de dirigentes locales. La paradoja para Cambiemos es que al oírlo y darle una vuelta municipal a la disputa deberían darle mayor protagonismo. Algo que buscaron evitar durante toda la campaña. 

"Hay una decisión -no la admiten, pero está instalada- de que Saredi no crezca, porque no representa al PRO", dicen desde La Matanza sobre el dirigente que tiene un discurso demasiado "peronista" para Cambiemos. A su vez, sugieren que Finocchiaro es clave para frenar el crecimiento de Saredi, porque todo el Gabinete de Macri conoce la interna matancera y ninguno tomaría partido por Saredi mostrándose mucho a su lado. 

Saredi cree que la tensión existe porque hay una diferencia de criterios sobre la estrategia electoral. Si bien sostiene que el voto de Cristina es "incambiable", cree que por su perfil peronista puede sacarle votos locales a Magario, pero no lo dejan.

"Le pegan más a Martín Insaurralde, que no va de candidato en Lomas, que a Magario que es testimonial. Nosotros tenemos una posibilidad concreta contra Verónica, de sacarle votos", explican los militantes de Saredi y adjudican la estrategia a los "celos" y a que quieren ganar pero buscan que la elección se mantenga nacionalizada.

Por eso, en su solitaria confrontación contra Magario, Saredi se dedica a tender puentes con peronistas locales. Siempre elogiando a Vidal -porque sabe que la Gobernadora mide bien- se acerca al peronismo y quiere incorporar a un sector a dirigentes que responden al ex intendente Alberto Pierri. Por eso, el sábado sacó un video en el medio Infobayres en el que se muestra con Raul Leguiza, que se fue del massismo y le da su apoyo junto al concejal Toto Delgado.

Según ese sector del peronismo local, el propio Pierri estaría detrás de esta movida. "Se pasan de la mano de Saredi", explican. Mientras tanto, Saredi sólo repite la necesidad de sumar dirigentes con "experiencia" y no explicita su postura respecto a un tema que el macrismo busca instalar ni bien pase la elección: la posibilidad de dividir La Matanza. Como contó LPO, Vidal quiere partir el municipio, mientras el kirchnerismo sugiere convertirla en una provincia.

Saredi admite tener cierta presión de sus militantes y los peronistas para que él "tome una decisión", mientras en La Matanza especulan con que sus provocaciones podrían terminar alejándolo del todo de Cambiemos una vez que pase la elección de octubre, que paradójicamente lo tiene como primer candidato local.

El dirigente no dice que vaya a irse del macrismo, aunque habla de armar un espacio peronista propio que aglutine a los sectores que no están con Magario y ven que Massa tuvo un techo.

No quieren que esto suceda fuera de Cambiemos, sino hegemonizar su sector en la interna contra Finocchiaro y establecerse como los referentes locales. Una posibilidad que suena improbable, ya que en el macrismo todos asumen que será el ministro de Educación el que tenga la visto bueno para construir en La Matanza de cara a 2019.

"Tal vez presionan tanto que en un tiempo los terminan echando del PRO", dijo fuente de Matanza a LPO sobre Saredi y su equipo. No descartan que el propio Pierri -que aseguran habla mucho con Duhalde- sueñe con un nuevo espacio peronista después de octubre.