Cristina Kirchner no curó las heridas por el cierre de listas de Mendoza, que dejó afuera a La Cámpora y ocasionó el despido de Juan Carlos “Chueco” Mazzón, el histórico operador del peronismo, con cargo en la Casa Rosada hasta la semana pasada.

Durante una videoconferencia con la localidad mendocina de Lavalle para presentar una nueva línea de elaboración de legumbres, previo a la presentación de nuevos aviones de Aerolíneas en Ezeiza, la Presidenta hizo ver su bronca con un destrato que rozó la mala educación con el gobernador peronista Paco Pérez.

El anuncio de la inversión lo hizo desde Mendoza el secretario de Comercio, Augusto Costa, y cuando las cámaras lo enfocaron no le dio la palabra Paco. Cristina por su parte no lo saludó, no lo mencionó y tampoco le dio el pie para que hable, a la máxima autoridad de la provincia con la que se estaba comunicando.

La situación fue tan violenta que los directivos de la firma Tetra Pack Recart,se mostraron visiblemente incómodos. Una vez finalizada la teleconferencia Paco Pérez se retiró entre desconcertado y furioso y en la gobernación mendocina los funcionarios y dirigentes no recordaban haber presenciado un episodio tan grosero por parte de un Presidente.

Como suele hacer la Presidenta para dejar en claros sus objetivos y enojos, fue la agencia Télam que maneja La Cámpora la encargada de completar el mensaje. En el cable sobre la inauguración publicada en su página web, reprodujo el milagro de nombrar absolutamente a todos los presentes, menos al gobernador.

"Cristina se comunicó con la planta de Molto, ubicada en la ciudad mendocina de General Lavalle para participar de la ampliación de la Línea Elaboradora de Legumbres Tetra Pack Recart, lugar en el que se encontraban el secretario de Comercio, Augusto Costa; el intendente de General Lavalle, Roberto Righi; el director General de Tetra Pack Cono Sur, Javier Quel; el presidente de Maxi Consumo, Víctor Fera; el ministro de Agroindustria y Tecnología de Mendoza, Marcelo Costa; y el diputado Nacional, Guillermo Carmona", consignó el cable de Télam sin temor al ridículo.

La tensión de Cristina con el PJ mendocino quedó clarísima cuando echó a Mazzón a quien había pedido que de de baja las listas acordadas por los sectores mayoritarios del partido, porque no incluían a sus protegidos camporistas. Mazzón le tuvo que explicar que en Mendoza existe el PJ y que él no podía "ordenarle" al gobernador y al vicegobernador que desarmaran las listas acordadas. Resultado, fue despedido.

Un día después, durante la Fiesta de la Vendimia, Paco Pérez desafió a la Presidenta y cuando la prensa lo consultó sobre el despido de Mazzón, no dudó en defenderlo: “Para nosotros, Mazzón es una persona muy importante”, afirmó. Esta noche, Cristina se la devolvió.