Las elecciones del Colegio de Abogados de la Capital Federal dieron como ganador al carismático Jorge Rizzo, líder de Gente de Derecho, la agrupación que acumulará su cuarto mandato consecutivo al frente del organismo rector de los letrados porteños.

Los rivales de Rizzo reconocieron su elección como “excelente”: el dos veces presidente del Colegio sacó el 45,8 por ciento de los votos. Al cierre de esta edición, acumulaba unos 9200 votos. Ratificación de un mandato que se caracterizó por un estilo de conducción de fuerte contenido gremial con soluciones prácticas y servicios básicos para los abogados "dea a pie".

Lejos de los grandes estudios pero con un puntilloso punteo del padrón, Rizzo aplicó muchas de las mejores prácticas del sindicalismo peronista a una institución anquilosada que supo renovar y acercar al abogado monotributista.

Su rival más consistente -ubicado en las antípodas estéticas y de prácticas-, el ex rector de la Facultad de Derecho de la UBA, Atilio Alterini, hizo una muy buena elección al cosechar más de 8000 votos y llegar al 38 por ciento, sobre un total de 18.652 votantes.

Alterini logró representar y contener dos sectores históricamente enfrentados como los radicales de Franja Morada y la derecha del "Colegio de Montevideo" que tiene en el macrista vicepresidente del Banco Ciudad, Juan Curuchet, uno de sus máximos referentes. Aglutinamiento que mezcló el patriciado d elos grandes estudios con el estabishment radical de la UBA.

El papelón lo protagonizó La Cámpora, que aparecía como el cuco en estos comicios. Es que el candidato kirchnerista, Damián Loreti, sólo llegó al 12 por ciento. El surgimiento de la lista camporista, encabezada por el redactor de la Ley de Medios, fue el principal motivo de preocupación de Rizzo que temió perder parte de su clientela en manos de la boleta que apañó la Casa Rosada.

Sin embargo, nada de esto ocurrió y La Cámpora estuvo muy lejos de respresentar una fuerza electoral imporyante entre los abogados porteños. "Se comprobó que al menos entre los abogados La Cámpora es piantavotos", afirmó a LPO uno de los protagonistas de la jornada.

Por eso, Loretti intentó sobre el final de su deslucida campaña -que hay que reconocerlo fue muy pobre en recursos-, intentó despegarse de la agrupación juvenil explicando que era apenas una de las 16 organizaciones que lo acompañaba.

No lo ayudo en ese intento su slogan "Colegio para todos", que lo emparentó directamente con varias iniciativas del kirchnerismo.

Como sea, con este resultado Rizzo colocaría 9 consejeros en la conducción del Colegio y Alterini 6.

Además, en el triunfo de Rizzo se vio su muñeca de puntero. Más allá del trabajo en el mundo gremial de la Capital Federal, fue fundamental su estrategia de acuerdos con abogados del Conurbano.

Como pudo saber LPO, el titular de Gente de Derecho obtuvo unos 1500 votos de abogados que trabajan en la Capital pero que provienen de las nuevas universidades del Gran Buenos Aires.

Artesanalmente celebró acuerdos con colegios y líderes de las universidades de la zona sur y laboriosamente terminó siendo el representante y quien le dio contención a ese sector que se está insertando en los tribunales porteños.

La Cámpora intentó captar a esos votantes a través de los intendentes del Conurbano, pero como era previsible, los jefes comunales tenían otras prioridades que atender.