En las últimas semanas, en el interior del PRO crece una inquietud, un temor silencioso en torno al futuro de la ex vicejefa de Gobierno Gabriela Michetti. El miedo que reina en el macrismo es una posible deserción de la diputada nacional, quien en los últimos meses aceitó sus contactos con el intendente de Tigre, Sergio Massa.

Luego de reiterados pedidos, Michetti se negó a encabezar el listado de candidatos en la Provincia de Buenos Aires para las elecciones legislativas del año próximo. Se le pedía un esfuerzo, el aporte de su buena imagen en un distrito donde el macrismo tiene algunas dificultades para instalarse, de cara al proyecto presidencial de Mauricio Macri.

En una cena privada, Michetti le dijo a Macri que no iría a ese distrito, pues su intención era seguir participando en la Capital. "No te voy a presionar y no te voy a pedir que cambies de opinión", fue la respuesta de Macri, como reveló LPO.

Pero en las últimas semanas, Michetti se mostró distante de algunas decisiones del líder del PRO. Luego del encuentro que mantuvo Macri con el titular de la CGT opositora, el camionero Hugo Moyano, la diputada dijo que hay que "olvidarse del estilo de Moyano. No es el estilo de sindicalista moderno, es decir, democrático".

El temor en el PRO surge por los crecientes contactos entre Michetti y el intendente de Tigre, Sergio Massa. Su diálogo es cada vez más fluido. En el macrismo temen que la diputada lance una candidatura en la Ciudad, en alianza con la postulación de Massa en Provincia. Ese escenario complicaría seriamente el panorama del PRO.

El contacto entre Michetti y Massa creció por Juan Tonelli -novio de la diputada porteña- y Claudio Ambosini, histórico hombre de medios de Massa. Entre ellos hay una amistad de toda la vida.