Alicia Kirchner salió a criticar con dureza a los cacerolazos contra el Gobierno del 13 de septiembre pasado, a los que atribuyó a “minorías que quieren mantener privilegios".

La ministra de Desarrollo Social se pronunció de esa forma luego de que la presidenta Cristina Kirchner minimizara aquellas protestas al asegurar desde Nueva York que "hay una parte muy pequeñita que cree que pase lo que pase en el país no le va a ir mal", en lo que fue la primera mención de la jefa de Estado sobre los cacerolazos.

Curiosamente, las palabras de Alicia llegaron minutos después de que el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, intentara suavizar sus críticas contra quienes participaron de esas protestas al afirmar durante la jornada que "en ningún momento" quiso decir que solo estuvo "la gente que va a Miami, sino que muchos de los que estaban ahí salieron a la calle por el cepo al dólar".

La aclaración de Abal Medina se produjo en una charla privada que mantuvo en la Casa Rosada con las integrantes de Madres del Dolor, según reveló su titular, Vivian Perrone, en un encuentro en el que le plantearon al funcionario que el tema de la inseguridad también formó parte de los reclamos en esas marchas del 13 de septiembre.

"Mientras las minorías hacen ruido para mantener sus privilegios, la gran mayoría de los argentinos seguimos trabajando para consolidar la patria justa, libre y soberana que nos permita avanzar en la inclusión de los 40 millones de compatriotas", aseguró Alicia Kirchner mediante un comunicado.

Convocó además a las organizaciones sociales, agrupaciones juveniles y movimientos de trabajadores "a no responder a las provocaciones de unos pocos que añoran reinstaurar la matriz neoliberal de los 90 a costa del hambre, la miseria y la exclusión del pueblo".

"El odio y la intolerancia de los sectores privilegiados no son generados por las cosas que hacemos mal, sino por las que venimos haciendo bien en estos nueve años de gestión", concluyó la ministra.