Darío Giustozzi lanzó en las últimas dos semanas un importante operativo de prensa (al parecer asesorado por voceros del ministro Florencio Randazzo), para tratar de tapar la escandalosa compra-alquiler de un helicóptero que hizo su municipio, uno de los más postergados de la provincia.
La Política Online reveló tiempo atrás que Giustozzi se había comprado un helicónpetro para desplazarse y ya estaba construyendo el helipuerto (en la intersección de las rutas provinciales 4 y 210, en la localidad de Burzaco). Esto en principio fue desmentido desde la Municipalidad, y luego no tuvieron más remedio que aceptarlo, pero afirmaron que se trataba de un alquiler.
Una vez que trascendió la información de LPO, la Municipalidad de Almirante Brown salió a difundir por medios afines que en rigor el helicóptero no se había contratado para que se desplace el intendente, sino que se destinaría “complementar” el trabajo de la Policía Bonaerense en el distrito.
Este medio había anticipado que la máquina venía siendo acondicionada en el aeródromo de San Fernando. Básicamente, con logos de la gestión del intendente Rubén Darío Giustozzi y se mencionaba un costo mensual de 300 mil pesos; gasto inédito en una gestión tuvo que realizar un ajuste sobre los gastos salariales con el recorte de horas extras a todas las dependencias, excepto Tránsito y Salud.
De manera, que con el tema ya instalado, Giustozzi comenzó un curioso raid mediático destacando las “ventajas” de haber sumado esta nave, que aclaró, no se comparaba sino que se alquilaba por un poco más de 1 millón por año. Y puso como ejemplo de su aporte a la seguridad que gracias a los vuelos del helicóptero se “descubrieron” seis desarmaderos, como si la policía bonaerense no contara con efectivos de inteligencia y sus habituales patrullas para “descubrir” estos enormes predios.
Giustozzi es uno de los intendentes del Conurbano que responden al ministro del Interior, Florencio Randazzo, de ahí que este funcionario le haya brindado la cobertura mediática para convertir un escándalo en una “buena noticia”. Sin embargo, el incomprensible gasto en uno de los municipios más postergados –récord, por ejemplo en gripe A-; es tan flagrante que las crónicas en distintos medios, si bien favorables, no dejan de señalar lo costoso del arrendamiento.
Pero la opacidad de la operación aumentó hoy, cuando al publicar Clarín la crónica de esta curiosa iniciativa de Giustozzi, señala que en rigor el arrendamiento costará 1,5 millones (y no poco más de 1 millón como había dicho inicialmente el intendente), y además agrega que se financiará con fondos de la Nación, como parte de un supuesto programa que se destina a sistir en materia de seguridad a los Municipios.
Datos nunca mencionados por Giustozzi y que abren más interrogantes de los que cierran: ¿Está previsto en ese plan que los municipios destinen esos fondos a alquiler helicópteros, y no a sumar mas patrulleros o policías?, ¿Al tratarse de una contratación con fondos de la Nación, se cumplieron con las licitaciones y demás procedimientos que fija la ley?