Las declaraciones del intendente de Mar Chiquita, anoche en una cena con intendentes y legisladores peronistas, tensaron esta mañana la cumbre de Mar del Plata, al punto que el faltazo de Wado De Pedro y José Ottavis al cierre de esa reunión se leyó en una lógica de tensión.

“Queridos chicos de La Cámpora. ‘El candidato es el proyecto’, pero el proyecto tiene nombre y apellido y se llama Daniel Scioli”, disparó anoche el intendente de Mar Chiquita durante su discurso en una cena organizada por el titular del PJ, Fernando Espinoza, en los salones del Hotel Provincial.

Esas palabras fueron motivo de comentarios y de preocupación durante el desayuno de hoy. En el sciolismo hubo quienes festejaron la frase y la replicaron en Twitter. Otros, la desaprobaron argumentando que “estuvo de más” y que no era ni el lugar ni el momento para que el jefe comunal diga lo que dijo.

“Nadie se puede molestar por eso. El que se enoja es porque no conoce a ‘Pitingo’ Paredi y no conoce al peronismo en la provincia de Buenos Aires”, dijo a LPO un operador del sciolismo tras el acto de cierre y cuando toda la plana de intendentes y legisladores se retiraban del hotel. Sin embargo, en el arco peronista también aceptan que cualquiera puede inferir que al intendente le pidieron que diga lo que dijo.

Con todo, la polémica se instaló por la tarde, al punto que el propio Wado De Pedro buscó trasmitir un saludo hacia el peronismo en Twitter y argumentó cuestiones personales que le impidieron estar en la cumbre. “Un abrazo muy grande a los compañeros que están reunidos en Mar Del Plata. Lamentablemente no los pude acompañar por motivos personales”, escribió el secretario General de la Presidencia.

En el escenario quedó el cartel con su nombre. Clara señal que los organizadores lo esperaron hasta último momento. Al filo del inicio del acto, quien ocupó esa silla fue el vicegobernador, Gabriel Mariotto.

Espinoza con la diputada Raverta, una de las pocas camporistas que fueron a la reunión de Mar del Plata.

Temprano, sorprendió la presencia del vice ministro de Seguridad, Julián Álvarez, en una de las mesas de trabajo, aunque después evitó mostrarse con los candidatos. Su presencia y sus compañeros de mesa brindaron una de las postales más interesantes de las comisiones de trabajo de la cumbre toda vez que se los pudo ver juntos a Alejandro Granados, Ricardo Casal y al camporista. Se sabe que Granados y Casal son enemigos íntimos. Pero además, el segundo de Julio Alak en Justicia fue un crítico acérrimo de las políticas de seguridad del sciolismo.

En tanto, la diputada provincial Fernanda Raverta también estuvo desde temprano. La marplatense tuvo que escuchar la chicana a su agrupación a pocos metros de Paredi. Pero además, tampoco se vieron banderas de la agrupación de Cristina durante el acto central y sólo se visibilizaron consignas del Movimiento Evita y la JP.

También se lo vio al camporista Walter Festa quien le ganó a Mariano West la interna en Moreno. Molesto, Festa aseguró que los dichos de Paredi fueron “una chicana inoportuna porque acá hemos venido compañeros de La Cámpora, han venido compañeros peronistas y compañeros peronistas que han estado en otro espacio político”.

“Obviamente que entendemos desde el primer día que el candidato es Scioli, pero hay un proyecto que se pone en juego, y ese proyecto el pueblo va a evaluar si tiene que continuar o no”, dijo el camporista al portal Letra P.