El insólito papelón del Ministerio de Economía con el ocultamiento de los datos de la pobreza no hizo más que revalorizar los informes privados, que ya ubican la cifra por encima del 30 por ciento.

Es por eso que el Gobierno echó mano de su viejo recurso de desacreditar todo lo que estorba y salió a cuestionar los datos de consultoras privadas. El encargado fue Jorge Capitanich, que además de calificar esos trabajos como "opositores", resaltó los éxitos de la "década ganada".

"No hay ninguna duda de que la reducción, y esto es absolutamente claro y contundente, que la reducción de la pobreza y la indigencia en Argentina en los últimos años ha sido drástica por el papel preponderante del Estado", afirmó el jefe de Gabinete en su conferencia de prensa diaria, en la que mencionó las mejoras en la materia respecto a los años 2001-2002.

"Todos los indicadores determinan clara y contundentemente que las condiciones de carácter social han mejorado de un modo sustancial", insistió Capitanich, que acompañó con una catarata de cifras e indicadores sociales

"Desde núcleos opositores y desde el arco opositor todo el tiempo pretenden desnaturalizar los efectos claros y contundentes de las políticas adoptadas" por el kirchnerismo, completó Capitanich respondiendo de esa forma a la consulta sobre los informes que ubican a la pobreza por encima del 30 por ciento.

LPO había adelantado que tras la devaluación de enero y la escalada inflacionaria, informes privados empezaban a alertar sobre ese número. "La pobreza tiene que estar cerca del 30%, y la indigencia puede haber subido un punto, hasta 8%", le dijo a este medio Isaac Rudnik, titular del Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci).

Según un informe del Instituto Pensamiento y Políticas Públicas (IPyPP), que coordinan los economistas Claudio Lozano y Tomás Raffo, la pobreza actualmente está en 36,5 por ciento. El trabajo difundido hoy por La Nación, fue elaborado por técnicos desplazados del Indec.

De acuerdo al estudio, el Gobierno oculta debajo de la alfombra a unos 13,4 millones de pobres, de los que 5 millones son indigentes. Además, considera que en un año -entre el segundo semestre de 2012 y 2013- se registraron 1,8 millones más de pobres.

En tanto, Agustín Salvia, titular del Observatorio de la Deuda Social de la UCA, estimó que "en la Argentina la pobreza se ubicaría cerca de 30 y la indigencia, en 10 por ciento, aún usando las canastas básicas medidas por el INDEC". El Observatorio, que estimó la pobreza en julio pasado en 24,5 por ciento, dará a conocer hoy sus nuevos datos.

"La pobreza bajó hasta 2010 y 2011, tendió a aumentar en 2012 y subió en 2013, medidas con los datos del INDEC. Lo que hay que señalar es que la indigencia no subió tanto, (sino que) se mantuvo estable en 8 ó 9 por ciento debido a la Asignación Universal por Hijo", sostuvo Salvia.

El sociólogo indicó que "antes de la crisis de la devaluación de enero y febrero, el INDEC proyectaba una canasta básica alimentaria de 2.000 pesos para una familia tipo" y señaló que para ese momento, "de acuerdo con los datos oficiales sobre distribución, 10 por ciento de la población registraba ingresos por esa cifra". "Ahora, si uno proyecta después de la crisis, el valor de una canasta básica total para una familia tipo es de 4.000 mil pesos, que es el ingreso de 30 por ciento de la población", completó. 

El miércoles, el Indec canceló sorpresivamente la difusión de los índices de pobreza e indigencia del segundo semestre de 2013. Tras el sinceramiento en la medición de la inflación y el PBI, se esperaba que esa cifra fuera mucho más alta de la que se venía dando. Ayer, el Indec dijo que la cancelación se dio por "severas carencias metodológicas" y "la imposibilidad de empalme con el nuevo IPC".