La Cámpora volvió a generar una polémica con el periodismo en la Cámara de Diputados de la Provincia. La diputada Rocío Giaccone pidió que se retire del palco de prensa una cámara de video porque, según aseguró a las autoridades de la Legislatura, sólo apuntaba a ella.

A pedido de la diputada, se le ordenó a la persona responsable que retire la cámara a pesar de argumentar y demostrar que se encontraba apagada. La actitud generó el rechazo y malestar de los periodistas que habitualmente concurren a la Cámara de Diputados a cubrir las sesiones parlamentarias.

No es el primer incidente que los jóvenes diputados tienen con la prensa. La propia Giaccone y José Ottavis quedaron enredados en medio de una causa por coimas, cuando desde el palco de prensa un fotógrafo captó una imagen del celular de Ottavis en el que se podía ver un mensaje de Giaccone en el que se mencionaban supuestos ofrecimientos de coimas a cambio de votos para aprobar un impuestazo al sector agropecuario.

En el Senado, La Cámpora no quedó afuera de la persecución al periodismo. Luego del escándalo del celular de Ottavis, el senador Santiago Carreras ordenó cerrar el palco de prensa.

Carreras, mano derecha de Gabriel Mariotto, buscaba que los periodistas no debían quedar detrás de los senadores del oficialismo. Es decir, se buscaba evitar una posición que permitiera a los reporteros gráficos tomar fotografías de los celulares y captar una imagen polémica como había ocurrido en Diputados.