La visita de Ron DeSantis a la frontera sur generó más rechazo que adhesiones entre las comunidades fronterizas y más indiferencia que debate entre los líderes políticos. El director de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas de la Casa Blanca, Rahul Gupta, destacó en visita a la frontera de Arizona el fin de semana que el uso de tecnología se ha convertido en la mejor arma para interceptar cruces fronterizos de fentanilo.

Gupta declaró en Nogales que nueva tecnología de punta ha permitido incautar el 89 por ciento del fentanilo interceptado en todas las gaitas a lo largo de la frontera con México desde octubre pasado. De ese total, más del 90 por ciento fue incautado en los puertos de entrada en Arizona.

Un oficial de la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) en la frontera de San Diego, Javier García, informó un caso que, con ayuda de tecnologíam fueron encontradas cerca de 900,000 pastillas contaminadas con fentanilo en un camión.

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Al pasar el camión por un sistema electrónico, CBP encontró discrepancias en el cargamento, y al revisar encontraron 900,000 pastillas contaminadas, con un valor de más de $2.5 millones si llegaran a las calles.

Este caso del resguardo cotidiano que menciona Gupta contrasta con un escenario que presentó DeSantis de una frontera sin ley y caótica que amerita un despliegue de tropas. El principal rival republicano de Trump aseguró la semana pasada que las fuerzas federales deben disparar a quienes crucen la frontera y la marina debe imponer un bloqueo a los puertos mexicanos para impedir que lleguen químicos para hacer fentanilo.

DeSantis advirtió que las fuerzas federales deben disparar a quienes crucen la frontera y la Marina debe imponer un bloqueo a los puertos mexicanos para impedir que lleguen químicos para hacer fentanilo.

En su visita a Texas, DeSantis presentó la línea más dura hasta ahora sobre los temas de la frontera y el fentanilo. Sin embargo, su mensaje no solo quedó sin eco, sino que le ha resultado contraproducente. Tal como reveló LPO, los latinos republicanos alineados con Trump salieron a calificar su visita a Texas como "puro show".

El gobernador de Florida habló en Eagle Pass, en la frontera con México, donde dijo que Trump falló en resguardar la frontera y ahora hace en su precampaña las mismas promesas incumplidas. Pero el ex presidente ignoró y dejó sin responder esas acusaciones. Para la campaña de Trump, la visita de DeSantis a la frontera pasó desapercibida. Tiene lógica: le lleva a DeSantis una muy amplia diferencia en las encuestas.

AP

"Usaremos todo el poder que tengamos a nuestra disposición contra México y los cárteles. Si están tratando de mover productos a este país y están matando a nuestra gente, no solo tienes el derecho, tienes la responsabilidad de contraatacar", declaró DeSantis.

Le preguntaron si eso significaba que los militares que proponía para la frontera dispararan a quienes cruzaran, y DeSantis respondió sin dudar: "Por supuesto".

"Si el gobierno de México da largas al asunto, DeSantis se reservará el derecho de operar a través de la frontera para asegurar nuestro territorio de las actividades de los cárteles mexicanos", dijo el gobernador al referirse a sí mismo en tercera persona.

"Si el gobierno mexicano no detiene la fabricación de drogas de los cárteles, DeSantis aumentará los recursos de la Marina y la Guardia Costera y bloqueará la entrada de precursores químicos a los puertos mexicanos", advirtió a aparecer ante un helicóptero junto a un cartel con la palabra Libertad en inglés.

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El gobernador republicano prometio reactivar el programa "Quédate en México". Instaurado en la era Trump, el programa obligaba a esperar en la frontera mexicana citas en cortes y avances a los solicitantes de asilo, sin permitirles seguir su proceso dentro de Estados Unidos.

La propuesta más severa de DeSantis contra la migración es una vieja idea de la línea dura del Partido Republicano de la década de los años noventa, de modificar la Constitución para impedir que los bebés que nazcan de padres indocumentados tengan la nacionalidad estadounidense.

Ninguna organización protestó durante la presentación de DeSantis en Eagle Pass ni hubo declaraciones posteriores después de su discurso. Esta vez el gobierno de México -que, tal como contó LPO resiste con todas sus fuerzas la ley antiinmigrante en Miami- tampoco respondió al gobernador. Aunque Gupta ofreció los datos de la Casa Blanca sobre trafico de drogas, la administración del presidente Joe Biden también eligió no responder directamente a DeSantis.

En cambio, la publicación Daily Beast advirtió que DeSantis violó la ley electoral al emplear recursos del estado de Texas, como el helicóptero y otros, para su campaña. Además, sentenciaron, para prevenir problemas deberá de reponer a los contribuyentes de Texas el gasto en que incurrió.

Ir a Texas es una decisión estrátegica de DeSantis. Esto se ve bien para usarlo en otras partes del país y decir: 'Mírame, estoy en la frontera. Sé lo que está pasando. Soy la mejor opción para manejar esto'.

El Director del Centro Sam Donaldson para Estudios de la Comunicación en Universidad de Texas, Richard Pineda, consideró desde El Paso que DeSantis pudo haber ido fácilmente a la frontera de Arizona o California, pero es posible que no haya encontrado la misma política. Pineda dijo que DeSantis eligió lanzar su plan contra la migración desde la frontera de Texas como "una decisión estratégica".

Estar en Eagle Pass tiene mayor significado. "Esto visualmente se ve bien para luego usarlo en otras partes del país para decir: 'Mírame, estoy en la frontera. Sé lo que está pasando. Soy la mejor opción para manejar esto'", dijo el analista.

De acuerdo con el doctor Pineda, que DeSantis hable desde Eagle Pass pueder ser un mensaje para electorados que desconocen la frontera, como los de Iowa o New Hampshire, pero no tiene resonancia con la gente de las comunidades fronterizas. Al contrario, opinó, su discurso puede distanciar a los potenciales electores locales, que cotidianamente interactúan y tienen fuertes lazos con la frontera mexicana.

"Como residente fronterizo, la retórica de DeSantis de deshumanizar a las personas que intentan cruzar a los Estados Unidos es, en mi opinión, realmente peligrosa", dijo Pineda a LPO.