El gobernador Gavin Newsom cumplió su cometido de elegir a una mujer afroamericana para terminar el periodo legislativo en el senado luego de la muerte de la senadora Dianne Feinstein, pero la selección parece haber dejado un fuerte descontento entre algunas estrellas demócratas.
Newsom nombró a Laphonza Butler para ocupar el puesto vacante dejado por Feinstein, quien falleció el viernes a los 90 años. Butler es lesbiana y directora ejecutiva de Emily's List, una organización que empodera mujeres demócratas a ganar elecciones y tiene una larga trayectoria: ha sido asesora de la vicepresidenta Kamala Harris y dirigente sindical.
"Laphonza ha pasado toda su carrera luchando por las mujeres y las niñas y ha sido una firme defensora de los trabajadores. Hará historia al convertirse en la primera lesbiana negra en servir abiertamente en el Senado de Estados Unidos", dijo Newsom en redes sociales la noche del domingo.
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Newsom aseguró que Butler sustituirá con similar grandeza el puesto que ocupó Feinstein a lo largo de más de tres décadas. Feinstein fue la senadora que permaneció más tiempo en la historia de la Cámara Alta.
Nancy Pelosi fue la encargada de traer el fin de semana a California los restos de la senadora que hizo historia en California de diversas formas. La histórica oradora de la Cámara de Representantes pertenece a la generación de mujeres demócratas que cambiaron la política de California y ya planea regresar al Congreso. En su mensaje, agradeció que los restos de la senadora volvieran envueltos en la bandera a su estado y a bordo de un avión presidencial.
La selección de Newsom por Butler ahora es para ocupar el cargo de manera interina. Cuando Feinstein enfermó, Newsom había adelantado que elegiría a una mujer afroamericana pero mencionó como potencial decisión la influyente magnate de medios Oprah Winfrey.
La lista de potenciales sucesores de Feinstein era amplia. Desde la alcaldesa de San Francisco, London Breed, a la jueza de la corte suprema estatal, Leondra Kruger, la contralora estatal, Malia Cohen, hasta la actual secretaria de Estado de California Shirley Weber y la encargada del metro en el área de la Bahía de San Francisco, Lateefah Simon.
La prensa local de California indicó en análisis que el gobernador podría sortear disgustos de aspirantes de su partido si eligiera a la abogada Angela Glover Blackwell, fundadora del think tank o grupo de expertos de PolicyLink, un instituto nacional de investigación y acción por la equidad racial y económica.
Feinstein era presidenta del consejo de supervisores de San Diego cuando, en 1978, atrajo los reflectores políticos nacionales. Ese año tuvo que asumir el gobierno de su ciudad conmocionada por el asesinato del supervisor Harvey Milk, el primer funcionario de gobierno electo en California que se presentó abiertamente gay. En aquel atentado, también mataron al alcalde de la ciudad, George Moscone.
El asesino de ambos, Dan White, dijo a una corte que había sido un doble asesinato accidental, y el jurado lo encontró culpable de homicidio involuntario, de dos personas en oficinas separadas. Obviamente era un veredicto influenciado por el hecho de que Milk era gay, y Feinstein, logró con mucho esfuerzo calmar las revueltas. Esa acción le llevó del período como alcaldesa interina, al puesto de titular en las elecciones de 1979, donde permaneció hasta 1983.
En 1992 volvió a hacer historia, junto con Barbara Boxer. Feinstein se convirtió en la elección de ese año en la primera senadora de California. Enseguida fue electa Boxer. Ambas demócratas novatas en la arena nacional quitaron sus puestos a dos republicanos con amplia experiencia y en la orgullosa California de Ronald Reagan al fin de la guerra fría.
Dos años después, la senadora Feinstein nuevamente hizo historia al impulsar una ley que prohibió la venta de fusiles de asalto en el país. Esa ley concluyó en el 2004 y desde entonces Feinstein enfrentó cabildeos multimillonarios de la Asociación Nacional del Rifle, la representación de la industrias de armas de fuego, para impedir que la ley se reactivara.
Entre sus propuestas, Feinstein impulsó junto al también senador republicano fallecido, John McCain, una normativa para que los campesinos indocumentados tuvieran una regularización de su condición migratoria como reconocimiento por alimentar al país.
Con su declaración de elegir a una mujer afroamericana al puesto que deja la senadora Feinstein, Newsom postergó a otros importantes aspirantes. El congresista Adam Schiff, quien encabezó la investigación del congreso por la toma del Capitolio el 6 de enero del 2021, competirá en 2024 como aspirante al puesto que deja Feinstein. Conocido por décadas en la política estatal, cuenta con el apoyo activo de Pelosi en su campaña. También lo respaldan docenas de sindicatos y actuales y anteriores funcionarios.
Katie Porter, una activista defensora de los consumidores experta en contralorías a corporaciones, es otra de las aspirantes al puesto y cuenta con el aval de la senadora Elizabeth Warren, de Massachusetts.
Por último, en la lista de candidatos figura la congresista afroamericana de Los Ángeles, Maxin Waters. Se trata de una dirigente que viene de expresar su malestar con las últimas declaraciones del gobernador. Es que Newsom admitió no estar interesado en que el nombra de la sustituta de Feinstein se defina en primarias y su postura podría dejar fuera de carrera a Waters, una demócrata que está en el Congreso desde 1993 y también representa a la generación de Feinstein y Pelosi.
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