El Frente de Todos en Córdoba no espera al peronismo de Juan Schiaretti y avanza con su armado territorial. Mientras el diálogo por la unidad sigue en cuarentena y las relaciones entre el gobernador y el presidente son cada vez más tensas, el espacio local que responde a Alberto Fernández busca ganar tiempo y representatividad en todos los departamentos que componen el mapa provincial.

Y como principal distrito electoral (representa casi el 40% del padrón total), la ciudad de Córdoba resulta una parada obligada en la ingeniería política que encabeza el senador Carlos Caserio por parte del PJ, y la diputada camporista Gabriela Estévez, del lado del cristinismo.

El albertismo busca consolidarse así en un territorio complejo: si bien a la ciudad la gobierna Martín LLaryora quien, a su vez, mantiene buen vínculo con el Frente de Todos; gran parte de la estructura del PJ capitalino responde políticamente a la primera dama, Alejandra Vigo.

La diputada es, desde hace años, la conductora del justicialismo local. El año pasado apoyó la candidatura del ex vicegobernador para la intendencia y contribuyó con su armado al triunfo de Llaryora que significó la vuelta del PJ al poder municipal después de cuatro décadas.

Vigo cuenta hoy con representación propia en la estructura municipal, en el bloque oficialista del Concejo Deliberante y en la Legislatura. Además, tiene delegados en las 14 seccionales y un fuerte vínculo con las principales organizaciones sociales de Córdoba.

En esa trama intenta penetrar con fuerza el albertismo cordobés que lleva como principales armadores a reconocidos dirigentes capitalinos, muchos de los cuales aún integran las filas del PJ orgánico.

La ex secretaria de la Gobernación, Olga Riutort, es una de las referentes del espacio de Caserio en la ciudad; de hecho, fue parte del pelotón de más de 50 cordobeses recibidos por el presidente en la Rosada en marzo pasado.

La ex esposa de José Manuel de la Sota que, desde 2007 se mueve por fuera del partido, estuvo muy cerca de cerrar un acuerdo y acompañar a Llaryora en la fórmula para las municipales del 2019. Vigo, le bajó el pulgar.

Otro de los que encargados de generar la base social del Frente de Todos en la ciudad es el ex presidente del PJ Capitalino y actual funcionario del PAMI Córdoba, Dante "Cacho" Heredia.

"Me encomendaron la organización de este espacio, una expresión clara de Alberto Fernández en Córdoba. Y más allá de las diferencias que puedan surgir a nivel de conducción, las bases ideológicamente apoyan las políticas de este gobierno nacional", dijo a LPO.

En esa misma línea de trabajo también se ubica, por ejemplo, el actual sub secretario de transporte de la Nación, Gabriel Bermúdez.

Por ahora, sin fecha cierta para las elecciones del partido en Córdoba, el trabajo territorial en el distrito electoral más grande de la provincia asoma sin grandes fricciones.

El problema será si, efectivamente, no hay acuerdo y se cae la posibilidad de alcanzar una lista de unidad entre el Frente de Todos y Hacemos por Córdoba. Entonces cada sector marcará sus fronteras y la dirigencia que hoy responde a Schiaretti pero comulga con el proyecto nacional de Alberto, deberá decidir, sin matices, de qué lado juega.