En el peor momento de su gestión como jefe comunal platense, Pablo Bruera brindó hoy su discurso de apertura de las sesiones ordinarias del Concejo Deliberante, ocho días después del temporal que azotó a la ciudad de La Plata y que dejó al menos 52 muertos y miles de viviendas afectadas.

Acompañado de todo su gabinete y ante un recinto donde a diferencias de otras veces no hubo banderas partidarias ni cánticos –sólo hubo aplausos cuando terminó el discurso y un extenso minuto de silencio al comienzo-, Bruera reafirmó las posiciones que venía manteniendo y se alineó con el Gobierno nacional, pese a que desde la Casa Rosada quieren hacerlo responsable por la catástrofe.

Bruera agradeció el respaldo y la ayuda del gobierno de Cristina Kirchner y destacó especialmente la labor del secretario de Seguridad, Sergio Berni. Además, defendió a La Cámpora y repudió las agresiones de presuntos integrantes de UOCRA contra la “militancia juvenil”. También le agradeció al ministro bonaerense Ricardo Casal.

Por otro lado, el intendente volvió a negar su renuncia. “Pondría mi nombre a disposición si eso sirviera para paliar un milímetro el dolor, pero no podemos poner en crisis institucional a la ciudad”, aseguró Bruera, aunque reconoció que desde el 2 de abril el programa de gobierno que tenía "ya no sirve".

El cuestionado Bruera dijo que no descarta que una inundación de la magnitud del martes pasado pueda volver a producirse. "La gente me pregunta si esto va a volver a pasar y les digo que no lo sé, que nadie lo sabe. No tengo la respuesta y la tenemos que buscar entre todos", declaró y apuntó a que “ni siquiera podíamos tener precisión sobre cuánto llovió”.

"Tenemos que trabajar en las causas de esto, en el origen, y en explicarle a los platenses que esto no va a volver a suceder", señaló y enseguida aclaró que "si bien es cierto que las catástrofes no se pueden evitar, tenemos que ver las cuestiones que pueden mitigar esto".

En ese sentido, se refirió a las obras que pudieron evitar la catástrofe y afirmó que es urgente que se lleven a cabo los trabajos en el arroyo El Gato, aunque le traspasó el problema a la Provincia. "La obra que se tiene que hacer no es en La Plata, sino en Ensenada, donde desembocan los arroyos", indicó.

Más allá de la ayuda anunciada por la Nación y la Provincia, el intendente pidió ayuda internacional para enfrentar la reconstrucción. "Estoy convencido de que nuestra ciudad necesita apoyo internacional para reconstruirnos, porque las obras tienen que ser realmente muy importantes. Tendremos que tirar los libros y empezar a escribir libros nuevos, para que se nos diga qué hacer", dijo.

Disculpas por el tuit

Bruera dedicó una parte de su discurso a disculparse por el escandaloso tuit en el que afirmó que estaba trabajando junto a los afectados desde el martes a la noche, cuando en realidad llegó al país desde Brasil el miércoles por la mañana.

“Les pido dos minutos para una circunstancia personal. La lamentable situación de la mentira en la comunicación, que lo viví como una gravedad muy importante. Cuando pude ver esta situación la traté de solucionar rápidamente, escribí y pedí disculpas públicamente, y me puse a trabajar porque no tenía manera de reflexionar en esa situación”, manifestó.

Y agregó: “Señores concejales si me lo permiten quiero volver a pedir disculpas nuevamente. Lo único que tengo en mi historia política es la palabra y fue dañada. Todo el pueblo de La Plata necesita de parte mía el reconocimiento de este error, y pedir disculpas. La única manera que tengo de pedir disculpas es trabajar, no tengo otra manera”.