Tensión, corridas, quema de neumáticos, amenazas, acusaciones cruzadas y hasta vehículos incendiados. Todo eso es lo que se vive por estos días en el Mercado Regional de La Plata que abastece de frutas y verduras a toda la región.

La escalada de violencia y tensión comenzó en la madrugada del lunes cuando unos 200 trabajadores de la "playa libre" cortaron la avenida 520 y quemaron gomas sobre las vías del tren. ¿El motivo? Sostienen que por una decisión del administrador del Mercado, una empresa se haría cargo de ese espacio obligándolos a formar una cooperativa.

Desde entonces, el predio se mantiene tomado y en los alrededores hay una fuerte presencia policial apostada en las inmediaciones a la espera de órdenes.

En las verdulerías ya faltan algunos productos y esto genera preocupación en las autoridades municipales. "Hicimos una denuncia penal porque lo ocurrido el domingo a la noche fue realmente un desastre. Estuvimos privados de la libertad, recibimos amenazas, piedrazos, prendieron fuego un vehículo y rompieron automóviles", dijo el administrador del Mercado, Mariano Suárez, en declaraciones al portal Infocielo.

Algunas versiones dan cuenta que la Municipalidad le pidió a la Fiscalía de turno el desalojo del predio, pedido que estaría siendo evaluado en estos momentos.

Pero, en medio del conflicto, también aparecieron pujas entre la Justicia y responsables policiales. El fiscal penal de La Plata, Marcelo Romero, formalizó la denuncia penal contra el comisario Jorge Silva, titular de la Jefatura Departamental de La Plata, al que acusó de “incumplimiento de los deberes de funcionario público y falsedad ideológica de instrumento público”.

El fiscal dio la orden de desalojar la protesta. Sin embargo, el oficial a cargo del operativo no habría acatado esa disposición.

Romero estuvo presenten en los incidentes de la madrugada del lunes y relata haber sido identificado por quienes protestaban. Según dijo, recibió una lluvia de piedras desde el piquete, una de las cuales lo golpeó en la espalda. “Evidentemente tenían gomeras, porque algunas piedras volaban como 150 metros”, contó el fiscal.

“Nos solidarizamos con Romero y solicitamos a Pablo Bruera que garantice la tranquilidad para los miles de trabajadores y vecinos de la ciudad que trabajan o viven cerca del Mercado”, dijo el diputado provincial Oscar Negrelli (Coalición Cívica).

El conflicto esconde una trama interna de puja de poder entre los sectores que conviven en el Mercado. Según denuncian, la Municipalidad pretende incorporar una nueva empresa y así cambiar la relación laboral. Actualmente los trabajadores realizan su actividad de modo independiente, y la intención de la administración sería "blanquearlos" creando una cooperativa.

Actualmente los trabajadores prestan sus servicios de manera informal en la llamada “playa libre”, descargando los camiones de los productores frutihortícolas de la Región. Pero a mediados del mes pasado, con el objetivo de regularizar la situación, la Comuna llamó a concurso público y adjudicó esa prestación a la firma Yavú S.A.

Liliana Gutiérrez, una trabajadora del área de limpieza dijo a la prensa que “no es cierto que el señor (Mariano) Suárez maneje esto. El verdadero jefe sin cargo es Sergio Mannarino, quien tiene una patota que funciona impunemente dentro del mercado amenazando y amedrentando continuamente a los trabajadores. La situación es insostenible”, sostuvo.

En declaraciones al portal Diagonales.com, Daniel, otro de los trabajadores, destacó que “acá (dentro del Mercado) se intenta por parte de la patota del municipio controlar todo para recaudar. Es lo único que les importa. Recaudar por encima de lo legal”.