La crisis se viene incubando hace meses y todavía no se expresó en toda su magnitud. Pero este fin de semana ya fue imposible ocultarla, cuando comenzó a trascender la carta de renuncia que dos importantes directivos de Federación Agraria Argentina (FAA) envió a los afiliados.

Se trata de dos de los dirigentes con mayor proyección de la entidad, nada menos que Esteban Motta, secretario de Juventud y Juan Manuel Rossi, secretario de Coordinación de la Federación Agraria Argentina.

Motta alcanzó cierta notoriedad durante el conflicto del 2008 cuando salió airoso de varios debates con el kirchnerista Juan Cabandié, en distintos duelos mediáticos, que según recuerdan en la entidad, motivaron los celos de Buzzi por el protagonismo del joven dirigente.

Como sea, en la carta que estos dirigentes enviaron por mail a todos los afiliados, Motta y Rossi explicaron que renunciaron a su cargos hartos de esperar que Buzzi avanzara con “una gestión institucional de calidad, y una administración profesional y eficiente, capaz de incluir y desenvolver a las cooperativas a partir del agregado de valor”.

La referencia no es casual, ya que en la entidad por lo bajo crecen las críticas a Buzzi por los supuestos manejos poco claros de los saldos exportables que el ministro de Agricultura Julián Domínguez le cede a Buzzi, para que distribuye entre las cooperativas de la entidad.

Pero acaso las críticas más duras tengan que ver con el estilo personalista de conducción de Buzzi, que en el conflicto del 2008 se vio con claridad cuando rivalizaba con el protagonismo de Alfredo de Angeli.

“Estamos cansados de las calumnias, de las injurias, de los contubernios y de la humillación entre compañeros federados”, subrayaron Motta y Rossi.

“Queremos dirigentes que sean verdaderos conductores del desarrollo en sus territorios, y no meros caudillos o lo que es peor: punteros políticos” afirmaron, para concluir de manera lapidaria: “Queremos que se rompa el pensamiento monolítico y uniforme, que se acepte la pluralidad de ideas, y que el mayor esfuerzo esté concentrado en la defensa de los productores y no en las disputas de poder interno”.

Además, los dirigentes cuestionaron que Buzzi se esté alejando de la base histórica de la entidad, desde que estableció una alianza con el líder de la Sociedad Rural Argentina (SRA) Hugo Biolcati, que en rigor para muchos es simple seguidismo.

“Creemos en los pequeños y medianos productores, en los agricultores familiares, en nuestros hermanos indígenas privados de la tierra. Creemos en los trabajadores que le ponen el hombro a la Entidad todos los días”, subrayaron.