“Regazzoni está en su puesto y trabajando con normalidad”, afirmaron esta noche a la agencia DyN, allegados al funcionario macrista. Es que las versiones sobre su salida del cargo se dispararon luego que los médicos del Sanatorio Municipal "Julio Méndez", anunciaran que se movilizarán el próximo lunes a la Legislatura porteña, a la apertura de las sesiones ordinarias para denunciar a Macri el vaciamiento de la obra social de los municipales.

La denuncia provino de la Asociación Sindical de Profesionales del centro de salud (Asipro) quien a través de un comunicado exigió "la inmediata designación" de médicos y técnicos "en los cargos vacantes y el reconocimiento de los jefaturas" que de hecho se ejercen en el Sanatorio.

Lo curioso fue que en el comunicado hablaron del “renunciado” Regazzoni, lo que obligó a los voceros de este funcionario a desmentir su salida. Lo cierto es que fuentes de la ObSBA afirmaron a La Política Online que al menos dos directores de la obra social manejan la información de que en el Ejecutivo se analiza la conveniencia de pedirle que de un paso al costado.

Es que desde que asumió el cargo la ObSBA se encuentra paralizada y con severos problemas de gestión. La desregulación entró en un cono de sombra, lo mismo que las obras de modernización del Méndez.

Enfrentado con los médicos y los municipales, Regazzoni sufrió la semana pasada un durísimo cuestionamiento del titular del gremio Amaedo Genta, que a través de su director en la ObSBA lo acusó de “cocoliche” y de crear una estructura paralela para designar a dedo cantidad de colaboradores.

Incluso, sospechas de irregularidades lo golpean, como el pago de más de un millón de pesos al Sanatorio Güemes por camas contratadas durante la epidemia de la Gripe A.