Por ello, ni bien recibe a La Política Online en su despacho en el noveno piso de Paseo Colón al 200, bromea: “Quería aclarar que no renuncio todavía”. Y agrega, ya más serio: “Tenemos un plan de gestión a cuatro años”.
Distendido, se sienta en un sillón negro para dialogar, término que utilizará en toda la charla como eje central de la política. Justo arriba de él, una camiseta de Atlanta enmarcada y con la firma de varios de sus jugadores se destaca en su oficina. Fue un regalo de su equipo de prensa hace apenas un mes. “Igual no entramos en el octogonal”, dice con una sonrisa amarga.
Vecino de Villa Crespo (aunque vive en Boedo), Narodowski tiene una historia muy rica en el ámbito académico y sus textos son material de consulta en las carreras de ciencias de la Educación (ver perfil).
Se define como “nuevo” en la política y recuerda los comienzos en la Fundación Creer y Crecer donde conoció a la cúpula de dirigentes que hoy lo acompañan en el gobierno. Dentro de las líneas internas del macrismo, se lo tildó de "michettista" por su cercanía a la ex vicejefa y sus dirigentes allegados.
Con un pasado de centro izquierda que se plasma en posiciones ideológicas que no abundan en el PRO, habla de la lucha contra la pobreza y de la inclusión social mientras traza una sincera autocrítica sobre el primer año de su gestión.
¿Es verdad que conoció a Mauricio Macri luego de una nota en el diario?
Sí, fue en una nota en Clarín. Él estaba armando sus equipos para la Fundación Creer y Crecer cuando todavía estaba (Francisco) De Narváez en ese momento. Había publicado una columna y se la recomendaron, y a partir de ahí me convocó para trabajar. Primero para realizar algunos estudios técnicos en 2002, y en ese momento Juan Pablo Schiavi (que fue uno de los organizadores de la Fundación y ahora es secretario de Transporte kirchnerista), con quien siempre tuve muy buena relación personal, me planteó si quería pasar a la política. Primero me causó mucha gracia porque jamás me hubiera imaginado….
Y menos en ese espacio político pensando en su trayectoria de izquierda…
No, para nada (sonríe). Me costó varios meses que me caiga la ficha de eso. Inclusive me acuerdo que lo comenté con un amigo de la Universidad de Quilmes, y que hoy es un importante funcionario kirchnerista. Le dije que Macri iba a ser jefe de gobierno y entró a matarse de risa. Me decía que estaba loco y “cómo me iba a meter en eso” (mueve las manos). Con Mauricio al principio tuve una relación más específica a mi tarea y luego se hizo personal.
¿Para esos tiempos conoció a Gabriela Michetti?
Gabriela Michetti empezó en los equipos técnicos también de la Fundación y ahí la conocí pero no había relación. Después cuando fue candidata a legisladora porteña (en 2003), hicimos un muy buen vínculo y el primer acto de campaña en el que estuvo lo organizamos nosotros con un grupo de docentes con los que trabajamos en el Club Español.
Desde allí, y luego de que Macri quedara detrás de Aníbal Ibarra en la segunda vuelta, Narodowski siguió trabajando “cotidianamente” con el PRO, en especial con el ex legislador y ahora secretario general Marcos Peña (quien fuera presidente de la comisión de Educación) y el actual diputado de la ciudad Marcelo Godoy. En cambio con Michetti, cuenta, conservó un “vínculo personal”.
Hoy es consultado por dos legisladores con los que trabaja temas del área: Fernando de Andreis, primer candidato a legislador en las últimas elecciones y vicepresidente de la comisión de Educación, y Victoria Morales Gorleri.
Autocrítica
¿Cómo analiza retrospectivamente el 2008? Sin dudas su área fue una de las más golpeadas por los conflictos y hasta se deslizó su renuncia en varias oportunidades…
La verdad que estoy muy conforme porque entendemos que desde el punto de vista de la calidad educativa y la inclusión escolar la ciudad ha mejorado mucho. Hay programas que planteamos el año pasado que al principio no se veían, y ahora se ven. Por ejemplo, inglés desde primer grado, están todas las escuelas conectadas o por conectarse a Internet, estamos recambiando computadoras, tres libros por chico, modificamos los planes de estudio del secundario que no se modificaban desde 1957. O sea una gran cantidad de cuestiones que no se conocen del todo salvo en el sistema educativo y que nos dan la señal de reversión de un proceso de deterioro de mucho tiempo que traía la educación de la ciudad. También fue un momento de mucho aprendizaje para muchos de nosotros, sobre todo a mí me sorprendió muchísimo el nivel de virulencia y prejuicio ideológico de muchos de la clase política.
¿Lo dice, por ejemplo, por las denuncias de una supuesta privatización de la escuela pública?
Sí. Agrego: decían que íbamos a echar a los docentes, y ahora hay más que el año pasado. Decían que íbamos a cerrar los programas sociales, y no sólo no los cerramos sino que los ampliamos muchísimo, como por ejemplo con las orquestas juveniles de las villas que cuando llegamos había seis y ahora hay trece. Dijeron que íbamos a cerrar la escuela de capacitación y el año pasado tuvo récord de alumnos. El objetivo por el que estamos trabajando es para mejorar la escuela pública e incluso para que la clase media vuelva. Entendemos que la escuela pública no puede ser una escuela para pobres sino para todos, como era antes.
Ahora bien, en el conflicto por las becas hubo, al menos, graves errores y hasta se llevó la renuncia de un subsecretario…
En cuanto a las becas habíamos tomado la decisión de que debía aumentarse el monto ya que lo que se pagaba era una vergüenza, $100 o $150 por año, y en algunos casos la propia Auditoria de la ciudad había denunciado una política clientelista en la entrega. Buscábamos darle más a quienes más lo necesitan. La verdad que el problema fue que no fuimos capaces de hacer eso de manera adecuada y recibimos la queja de mucha gente que la necesitaba y no la recibía. Lo fuimos corrigiendo a lo largo del año pasado . Este es un caso muy claro de igualdad de oportunidades y calidad educativa. Por eso me llama mucho la atención que cuando las becas eran de $100 nadie se quejaba y que la gente se empiece a enterar que había becas en la ciudad cuando las subimos a $600 y $800 el año pasado. Esto es el aprendizaje: salir de una situación de mucho deterioro tiene un costo, en términos de gestión, muy alto. Hubo un problema de implementación: la fórmula era correcta, de hecho es lo que se está haciendo, pero la implementación en algunos casos fue equivocada. Yo mismo me daba cuenta recorriendo escuelas que había chicos que necesitaban la beca y no la tenían.
Otro tema fue un famoso documento en el que se le pedía a los docentes y directores de escuela que revelen la identidad de los alumnos que tomaban escuelas….
Lo que había era un instructivo de la época de Ibarra que cuando los chicos tomaban una escuela, los profesores tenían que quedarse acompañándolos y hacer una lista de los que tomaban la escuela para informar a los padres. Eso no se cambió y lo único que dijimos fue que los docentes no se tenían que quedar a la noche.
¿Qué componente político tuvo el reclamo salarial por parte de los sindicatos docentes, en especial Ute (el más grande de la ciudad)?
El componente político creo que fue obvio: son dirigentes gremiales kirchneristas que inclusive después de las elecciones quedó claro cómo funcionaban. Me parece muy importante poder llegar a una situación de equilibrio con los sindicatos porque es una gestión que confía en los docentes. Durante muchos años en el ministerio cada vez que una familia o los alumnos se quejaban de decisiones pedagógicas que tomaban los docentes, el ministerio siempre le daba la razón a todos menos a los docentes. Desde que llegamos nosotros esto cambió absolutamente. Con los sindicatos hay que tratar de trabajar en conjunto para mejorar la calidad educativa.
¿Cuánto pesó en la ofensiva gremial su pasado en UTE?
No lo sé, tengo muy buenos amigos en UTE…
Lo digo porque los dirigentes gremiales repetían off the record que usted los había traicionado…. (N. de la R.: Narodowski integró los equipos del gremio y realizó estudios en la zona sur de la ciudad sobre calidad educativa)
No, yo me fui de Ctera cuando se hizo la Alianza, el Frente Grande se alió con De la Rúa y él entró a la Carpa Blanca. En ese momento no compartía la decisión que habían tomado, y había muchos dirigentes sindicales que tampoco lo compartían pero yo era un colaborador, la mayor cantidad de tiempo ad honorém, así que fue una decisión personal.
¿Ahora bien, a su favor, la candidatura de Tito Nenna le sirvió para cristalizar una situación que se mantuvo en las sombras?
Con ese mismo criterio podemos ver el paupérrimo récord electoral y el poco apoyo que tuvo de la población. Lo cual no le quita legitimidad porque los que estamos en política sabemos que conseguir el 11% cuesta mucho, pero finalmente ese es el apoyo que tuvo ese espacio político. Es cierto que Tito logró consolidar su imagen con su candidatura pero también es cierto que la población no los apoyó. Este año hay una corriente de diálogo mucho mayor, oficial y extraoficial. Y creo que todos aprendimos, y da un marco de mayor madurez para hacer lo mejor para las escuelas.
En medio del conflicto, ¿es verdad que en muchas oportunidades Ute y otros gremios concurrían a la mesa de discusión salarial a sabiendas que iban a sostener una negativa a cualquier oferta?
Eso pasó varias veces, pero también tengo que decir con autocrítica que nosotros hemos tenido posiciones necesariamente duras, en términos gestuales y simbólicos. Y muchas veces terminábamos discutiendo la gestualidad y no la realidad… Tengo que admitir que tuvimos gestos totalmente innecesarios…
Perfil:
Mariano Narodowski es licenciado en Ciencias Pedagógicas, por la Universidad Caece, y doctor en Educación, con especialización en Historia de la Educación, por la Unicamp, de Brasil.
Fue director del área de Educación de la Universidad Torcuato Di Tella, donde dictó clases en las materias de Pedagogía, Sistemas Educativos Comparados, Política Educativa, y un Seminario de Integración.
Además de ministro de Educación porteño, fue coordinador del área de Educación de la Fundación Creer y Crecer.
Trabajó la historia y las políticas educativas comparadas, especialmente su aplicación en contextos socioeconómicos desfavorables.
Dirigió proyectos de investigación y tesis, y sus trabajos son leídos en las carreras vinculadas a la Educación.
Es autor de varios libros –entre ellos-: "La crisis laboral docente" (1988); "La escuela argentina de fin de siglo" (1996); "Escuela, historia y poder"; "Miradas desde América Latina" (1996); y "El desorden de la educación".
Fue otro capítulo bochornoso de la política argentina. A veces nosotros como dirigencia dejamos mucho que desear. Por ser nuevo en la política uno va aprendiendo, a partir de errores que tienen que ver con el poco manejo de la política y lo institucional, para que no se vuelvan a repetir.
Postkirchnerismo
Ya en términos de análisis, ¿cómo está viendo el denominado “postkirchnerismo”?
Prefiero usar el término “fin del ciclo kirchnerista” que usa Macri, porque es un ciclo que se termina en diciembre de 2011 y me parece que hay que acompañar las iniciativas de diálogo para contribuir a la gobernabilidad. Como ciclo político es un fin pero esto no quiere decir que no se puedan reinventar pero será algo completamente diferente. El desafío desde el punto de vista Político, con mayúsculas, es que no haya un cambio de ciclo en el sentido tradicional. Esto es, que el péndulo vaya de un lado para el otro. El desafío que viene es encontrar puntos de equilibrio. Reconocer que algunos elementos de la administración kirchnerista fueron positivos, sobre todo en la primera étapa, y relacionados con el superávit fiscal y comercial, pero falta agregarle otros puntos importantes de la economía como el trabajo de la gente, mayores inversiones o mayor innovación tecnológica, que ha sido una asignatura pendiente del gobierno de los Kirchner. El gran desafío es no pensar estos cambios en los términos facciosos tradicionales, sino que tiene que ser un punto de equilibrio, de reconocimiento de lo positivo que tenemos e ir mejorando de a poco.
¿Qué opina del reciente llamado al diálogo?
No se puede entender que la dirigencia política no converse, aunque sea para delimitar los disensos para ver después en que sí estamos de acuerdo. A la gente no le importa la rosca, la opereta, le interesa que le resolvamos los problemas. Me parece absurdo que no se hable.
¿Y cree que este es un problema histórico o que se desarrolló en los últimos años?
Hay una deuda generacional, no en términos de edades sino en términos de una generación política que se va a tener que hacer cargo en 2011, que va a gobernar y que en todos estos años de experiencia democrática debiera (“debiéramos”, se corrige rápidamente) generar un cambio profundo respecto a la lógica de gobierno. Es fundamental dejar de lado el país faccioso. Esto es: “las veredas”. Como decía Menem, “de qué vereda estás”. En el caso de los Kirchner fue exactamente igual. La forma facciosa no contribuye al desarrollo. También hay que terminar con la lógica de rentismo estatal, pensar que la solución de todo es un subsidio. Ya sea a grandes empresas o ya sea a una persona desocupada. No digo que algunas de esas soluciones transitorias no sean necesarias, pero creo que la renta estatal como forma única de movimiento de la economía no funciona. Hay que ir a un capitalismo serio, con reglas más claras, y por eso es fundamental recurrir a la innovación, a la tecnología, con todo lo que este país tiene para desarrollar.
El PRO y el futuro macrista
¿Macri representa esta nueva generación que encarna estas ideas de diálogo y debate no faccioso?
Macri es lo nuevo, sin ninguna carga valorativa. Somos nuevos. La verdad que, respondiendo a la pregunta, creo que sí, tengo todas las esperanzas. ¿Es posible un capitalismo sin patrones de estancia? ¿Es posible una sociedad de mercado sin autoritarismo? ¿Es posible tener reglas de juego claras? ¿Es posible tener un programa muy preciso de combate a la pobreza como prioridad nacional? Estoy convencido que sí. Ahora, para eso hay que dejar de lado la lógica facciosa y entender la posibilidad de aportes. No lo digo desde la ingenuidad, y no creo que el conflicto sea necesariamente malo, pero del conflicto tiene que sobrevenir en función de diferencias reales y se tiene que dirimir por los canales democráticos y no de manera salvaje.
Insisto: ¿Macri encarna todas estas características que destaca?
Para mí Mauricio es lo distinto. Nosotros lo sabemos a Mauricio distinto, él se sabe distinto. Me parece que él encarna muchas de estas cuestiones. Está comprometido con lo nuevo, está tratando de generar otras oportunidades, tratando de generar otra calidad institucional. Por supuesto que vivimos en este país y no estamos exentos de la lógica de nuestra sociedad. La gran crítica que le hago a los grupos progresistas, a los que pertenecí muchos años, es que ellos se ponen afuera de la sociedad y después vienen los grandes fracasos y decepciones. El PRO no se pone afuera y tratamos de entender, con muchas dificultades, como mejorarle la vida a la gente. Y la verdad que el país que se viene tiene que ser un país de resolución concreta de problemas, y esto es lo más complicado: tener una lógica más pragmática y más seria de trabajo en los grandes problemas como la educación, la pobreza y el desarrollo.
¿Por dónde cree que debería avanzar la construcción del PRO hacia 2011?
Una de las características de la Argentina es que no tiene más partidos políticos. Y los intentos de reconstrucción de los partidos de arriba hacia abajo, como intenta el radicalismo, son muy problemáticos porque los partidos no dejan de existir por la defección de sus dirigentes sino porque la sociedad cambió. Quizás sea un defecto pero es así la realidad. Entonces la construcción es horizontal, es una construcción “líquida” y no la tradicional de los partidos. En nuestro espacio convivimos dirigentes con historias totalmente distintas razonablemente bien y con un programa de acción consensuado. Acá hay ideas social - demócratas, liberales, demócrata cristianas… La realidad líquida permite que convivan y construir una realidad política.
¿Qué figuras le cautivan de la política actual?
A mí sólo me cautiva la figura de Mauricio Macri. (Risas)
Finalmente, ¿a qué atribuye los infinitos rumores de su renuncia, a la ofensiva de la oposición contra su figura o a las internas del PRO?
¿Por qué las dos cosas por separado? (Risas) La verdad al principio le daba importancia pero ya llega un momento en que ya no es un problema. Estoy muy bien con Mauricio, con Grindetti (ministro de Hacienda), con (Horacio Rodríguez) Larreta… Con Horacio vengo trabajando desde hace siete años y forma parte de lo que es el macrismo: estéticas diferentes e historias de vida diferentes que en el fondo nos enriquecen. Estamos trabajando muy bien y estamos en un momento muy importante del gobierno porque estamos consolidando muchas cosas que se hicieron.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.
La temperatura ambiente era inferior a la actual y varios grado por cierto.
Los varones ibamos con pantalones cortos y la niñas con polleras, nada de jeans.
Sin embargo no nos haciamos ningun problema.
Si sacabamos una mala nota uno de nuestros padre se presentaba en el colegio para saber que era lo que andaba mal en cada uno y siempre le daban la razon al profesor o al maestro.
Terminabamos nuestros estudios sabiendo , no que como ahora solo saben la grilla de los programas de tv. para enganchar un viaje de fin de año.
La regla de tres simple la aprendiamos en segundo grado.
Ahora en quinto.
Me parece que lugar de subsidios lo que se necesita son lÃmites, el principio de autoridad y respeto hacia los docentes, y por sobre todas las cosas ganas de estudiar y aprender.
Finalmente quien paga los subsidios ?
Teniendo en cuenta que el estado no tiene recursoa propios y que por cada peso que gasta primero lo ha recaudado via impuestos, quien paga los subsidios ?
Lisa y llanamente todos nosotros a traves de los 83 impuestos, entre los nacionales,los provinciales y municipales
De los ingresos totales por cada contribuyente, el estado ya sea gob.ctral, pcial o municipal se queda con el 68,5% de sus ingresos anuales, es decir que trabajamos del 1° de enero al25 de agosto para el estado y del 26 de agosto a fin de año para nosotros mismos.
Quien va a querer invertir entonces, quien va a querer arriesgar su capital.
El estado engendra el paro que pretendia evitar.
Asi de simple.
Ahora comprendo todo.
¿Entonces, estos tipos son unos improvisados?
¿Y unos ladris de guante gris?
¡No te puedo!
Allà están los dinerillos de los contribuyentes.