En la primera sección, lo que se está definiendo es si finalmente Carlos “Tato” Brown encabezará o no la lista de senadores provinciales, lo que hasta ahora parece difícil y algunos dan como cosa juzgada. Pero a su vez, otro intendente vivió una situación interesante que, finalmente, no fue.

Jesús Cariglino protagonizó lo que pudo ser una bomba noticiosa que finalmente quedó en la nada. Se había especulado con que el intendente de Malvinas Argentinas podía romper con el kirchnerismo y acercarse al peronismo disidente, “porque en realidad responde a Solá - es el único intendente que tiene aún en su despacho la foto de Felipe-”, aclaró una fuente a La Política Online.

Con él podían llegar también el intendente de San Miguel, Joaquín De la Torre –un mensaje directo a Aldo Rico-, y su par de Hurlingham, Luís Acuña. El anuncio iba a hacerse el jueves y después se pasó al viernes. Pero quedó en la nada.

“Cuando le avisaron del poco margen de negociación que estaba teniendo Solá en el armado de la lista, dejaron los pases para mejor oportunidad”, expresó a este medio un operador bonaerense.

Si esto se daba, explican, el manejo del cierre de listas quedaba a merced de las imposiciones de los intendentes. El acuerdo incluía que varios de los legisladores provinciales que intentan renovar y que no tendrían posibilidad de hacerlo por el oficialismo (porque los relegan y porque además, se especula que el caudal de votos será menor) ocuparan los primeros lugares de las listas seccionales de Unión-Pro.

La jugada, como adelantó este medio, respondía a la lógica duhaldista que aplica Alfredo Atanasof –jefe de campaña de De Narváez- de ir cerrando con intendentes para minar el poder kirchnerista y establecer una línea de contactos con miras al 2011, donde el empresario sueña con ser gobernador.