El Gobierno nacional analiza la posibilidad de desplazar a un segundo plano al estudio Cleary, Gottlieb Steen & Hamilton como representante letrado de la Argentina en el juicio con los holdouts en los tribunales de Estados Unidos, según trascendió hoy de fuentes allegadas a la negociación.
"Es sabido que (Alfonso) Prat Gay no está de acuerdo con la estrategia que desplegó Cleary, Gottlieb Steen & Hamilton a lo largo del juicio", señalaron los voceros.
No obstante, se aclaró que Cleary, Gottlieb Steen & Hamilton mantendrá un lugar dentro del grupo de defensores del país para conservar sus conocimientos acumulados. "No lo reemplazará, sino que trabajará junto a ellos", precisaron las fuentes.
La decisión de cambiar el estudio de abogados no sorprende si se tiene en cuenta la dura posición que Prat Gay tuvo históricamente respecto a los holdouts y representa un giro respecto a la defensa de la Argentina de los últimos años.
El ministro fue siempre muy crítico del canje de deuda que hizo Roberto Lavagna en el 2005, uno de los motivos por los que dio un paso al costado del gobierno de Néstor Kirchner.
El ex JP Morgan se opuso a que se entregara el cupón de PBI en la oferta a los bonistas porque volvía la quita mucho más modesta de la que se vanagloriaba de haber obtenido Lavagna, que la ubicaba en torno al 75%. Por eso, Prat Gay considera que la demanda de los fondos buitre no tendría que haber tenido lugar en la justicia, ante el “regalo” que le ofreció Argentina en el primer canje de deuda.
En ese sentido, el propio Prat Gay se presentó como Amicus Curiae ante la justicia norteamericana en el 2013, reforzando su postura en contra de mejorarle la oferta a los holdouts.
Para la nueva contratación, se llamará a una compulsa de ofertas y según los trascendidos picarían en punta los estudios Shearman & Sterling y Watchel Lipton, ambos con curriculum en litigios de deuda.
Siempre de acuerdo a los voceros, Prat Gay vería con buenos ojos contar con los oficios de Watchel Lipton por los resultados que obtuvo en juicios similares enfrentando a holdouts.
Sin embargo, fuentes del mundo judicial explicaron a LPO que en marzo pasado dos abogados del estudio Shearman estuvieron presentes en una audiencia: se los pudo ver entre el público.
Esos dos letrados tuvieron una reunión con el ex ministro de Economía, Axel Kicillof, para reemplazar a los del estudio Cleary. Pero no llegaron a acordar por culpa del boicot que hizo la Procuración del Tesoro para mantener a Blackman y Boccuzzi, con quien mantienen un estrecho vínculo.
Quien sea designado será la cabeza del nuevo cuerpo de representantes legales, con Cleary como soporte.
Lo cierto es que, como explicó LPO, esa firma estuvo lejos de obtener resultados destacables en la defensa del país frente a los fondos buitre: la Argentina perdió ante Thomas Griesa, luego ante la Cámara de Apelaciones, y volvió a fracasar por tercera vez cuando la Corte Suprema se negó a tomar el caso, dejando firme la sentencia original.
Incluso dentro del kirchnerismo sospechaban que los abogados Jonathan Blackman y Carmine Boccuzzi en realidad apostaban a estirar el litigio en el tiempo lo más que puedan para así embolsarse sumas millonarias.
De hecho, la decisión de Cristina de no arreglar y llevar el país al default ya había sido anticipada en un paper del propio estudio que se filtró a la prensa.
El problema es que cambiar de estudio a mitad de juicio no es cosa fácil: implicaría que los nuevos abogados tienen que empezar de cero una causa sumamente compleja, con un resultado incierto. De ahí que, desde el alfonsinismo, cuando ese estudio fue contratado por primera vez, ningún gobierno pudo deshacerse de sus servicios.
La Argentina comenzará en la segunda semana de enero una negociación directa con los holdouts, que cuentan con fallos favorables de Thomas Griesa por unos 10 mil millones de dólares.
A poco de asumir el gobierno, Mauricio Macri envió al secretario de Finanzas, Luis Caputo, a reunirse con el mediador judicial Dan Pollack.
En ese encuentro Caputo transmitió la decisión del gobierno argentino de iniciar negociaciones formarle con los acreedores en litigio en la segunda semana de enero.
Para ese momento, Prat Gay pretende contar con un estudio de abogados que se adecue a su estrategia de negociación.
Cleary, Gottlieb Steen & Hamilton asesoran al país desde fines de la década del 80 y fueron quienes idearon la estructura legal de los canjes de deuda que se realizaron en 2005 y 2010.
Luego se convirtieron en los representantes del país frente a los juicios encarados por los holdouts. Y hasta ahora el gobierno siguió siempre al pie de la letra las propuestas del estudio.
Prat Gay aspira a mantener ese know how pero con un segundo buffet de abogados que tenga otra estrategia.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.
Se dilatan las negociaciones con los buitres por la dura posición de Prat Gay
