El nuevo tramo del swap con China se destrabaría recién en noviembre, tras el agotamiento de los U$S11 mil millones pautados en el acuerdo que se firmó el año pasado entre la Argentina y la potencia asiática.
Así lo dejó entrever hoy el el titular del Banco Central, Alejandro Vanoli, quien se reunió con el vicepresidente del Banco Popular de China, Yi Gang. Juntos, evaluaron el swap de monedas que ambos países mantienen desde el año pasado, que le permitió al gobierno apuntalar su nivel de reservas.
"Se evaluó como muy favorable la evolución del swap de monedas iniciado en octubre de 2014 y se acordó seguir avanzando en la política de darle continuidad a éste y otros acuerdos", dijo la entidad monetaria en un comunicado de prensa.
Ambos funcionarios se encontraron en el marco de la Asamblea Anual del FMI que se está desarrollando en Lima, Perú.
El parte de prensa no detalla la posibilidad de un nuevo swap, ni de eventuales montos de la transacción, aunque se hablaba de un monto en torno a los U$S2000 millones.
No obstante, adelantó que "las delegaciones de ambos bancos centrales mantendrán reuniones durante el mes próximo en Buenos Aires y en Beijing orientadas a avanzar en nuevas alternativas de cooperación", por lo que es de esperar que este nuevo tramo se destrabe recién en noviembre, más cerca de la entrega del poder de Cristina Kirchner.
Antes de la reunión con el funcionario chino, Vanoli participó de una reunión de trabajo junto con presidentes de bancos centrales y ministros de Economía convocada hoy por la directora general del Fondo Monetario Internacional (FM), Christine Lagarde, en el marco de la asamblea anual del organismo que se celebra en Lima, Perú.
Lo cierto es que Vanoli necesita como el agua de este nuevo swap de monedas para poder mostrar un nivel respetable de reservas. El Central viene vendiendo divisas a un ritmo de más de U$S100 millones por día.
Hoy se fueron U$S110 millones por esta vía y de esta manera las ventas acumularon U$S570 millones en cinco días. Hasta ahora, el BCRA logró “maquillar” esta caída por medio del swap con China. Pero los economistas sostienen que los U$S11 mil millones del acuerdo original ya se habrían agotado y las negociaciones con la potencia asiática por un nuevo tramo confirman que el stock de divisas ya está en un nivel crítico y no tiene perspectivas de repuntar.
En ese sentido, el lunes hubo un duro golpe por U$S4700 millones tras el pago del Boden 2015. El gobierno esperaba recuperar parte de esa plata mediante el Bonar 2020, que ofrecía un rendimiento incluso superior al Boden, pero solamente logró colocar unos U$S660 millones.
Hoy analistas de Moody’s plantearon que las reservas alcanzaran sólo hasta el 10 de diciembre. Es que, como explicó LPO, las “netas” estarían en torno a los U$S6000 millones. El resto no podría utilizarse para enfrentar una corrida contra el peso.
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