La diputada Mayra Mendoza se acercó al presidente Vladimir Putin en el foro Euroasiático de mujeres para pedirle ayuda al asegurarle que "quieren meter presa" a Cristina Kirchner para impedir que sea reelecta.

La dirigente de La Cámpora lo contó en sus redes sociales. Según su versión, lo llamó a Putin al grito de que "necesitamos ayuda" y le contó que Cristina es "víctima de lawfare".

"La quieren meter presa para que no vuelva a ser presidenta", le contó la camporista y aseguró que el presidente ruso la saludó y se llevó uno de los volantes que estuvo repartiendo en el foro, con la cara de Cristina y el lema "Argentina sin Estado de derecho".

No es casual que el kirchnerismo recurra a una figura como Putin, que supo tener una alianza geoestratégica con la ex Presidenta, en contraste con la tensión que arrastra con Mauricio Macri por temas como la represa de Chihuido y el puerto Ramallo, una obra de Gazprombank paralizada por la burocracia de la Provincia.

Como contó LPO, la relación entre Macri y Putin empezó tirante cuando el argentino le pidió una rebaja en la tasa de interés de lo que sería el crédito para construir la represa Chihuido. El ruso se enojó y retiró la oferta.

Más recientemente, cuando Macri visitó a Putin en Moscú, los rusos que le explicaron que llevaban al menos dos años esperando poder concretar inversiones en el puerto de Ramallo, pero que estaban frenadas por un trámite administrativo en la provincia de Buenos Aires. Se trata de 500 millones de dólares, cifra para nada despreciable en el momento que atraviesa el Gobierno. Macri que fue a buscar inversiones no supo como explicar por qué la burocracia frena una tan importante.