En el mes de junio el precio promedio de la leche pagado al productor se ubicó en $ 6,40 por litro en las principales cuencas del país. Se trata de un valor menor al recibo en mayo pasado cuando las industrias lácteas abonaron a los tamberos $ 6,50 por litro.

El dato -que publica el índice IPOD que elabora mensualmente la CAME- es que en junio, el valor medio de la leche en las góndolas de las principales cadenas de supermercados fue de $ 30,40 por litro, mientras que en mayo era de $ 28,60 por litro.

Es decir, en mayo/junio la participación del productor de leche en la cadena de valor bajó del 22,7% al 21,1%, muy lejos del 33% que reclaman los tamberos para que la actividad sea rentable (el costo de producción de un tambo promedio ronda los $ 6,50).

El informe de la CAME muestra que en junio la diferencia entre lo que pagan los consumidores en las góndolas y lo que cobran los productores en el campo fue del 375%, mientras que en mayo dicha brecha se ubicaba en un 340%.

Sin rentabilidad, la producción lechera atraviesa una situación "desesperante"

Además, si el valor que reciben los tamberos se mide en dólares, en junio el precio cayó aún más. Considerando el tipo de cambio de referencia del Banco Central, el valor pagado al productor fue de u$s 0,24 el mes pasado versus u$s 0,25 en mayo.

Toda esta situación se produjo en un contexto en el cual la industria exportadora ya está gozando las mayores ganancias que le permitió la devaluación de casi un 50% en lo que va del año (el negocio exportador se tornó mucho más rentable que el año pasado).

Hasta el momento los tamberos no se vieron beneficiados por la suba del dólar sino todo lo contrario. Los costos subieron en el último año notablemente: el balanceado tuvo un aumento del 92%, el expeller de soja un 63%, el verdeo 41% y la pastura 36%.

El congelamiento de precios a los tamberos se da además en medio de un aumento productivo. En los primeros cinco meses del año, la producción de leche fue de 4.009 millones de litros contra 3.718 y 3.934 millones en el mismo período de 2017 y 2016.

Tambos y productores de cerdo, los más perjudicados por la devaluación

Para tener una idea del impacto de la devaluación en los tambos, la tonelada de maíz -el principal insumo- hace un año se vendía a $ 2.440, mientras que el viernes pasado en la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) se comercializó a $ 4.000 (casi el doble).

En el Mercado de Chicago (CBOT), el maíz bajó en el último año de 146 dólares por tonelada a 130 dólares. La soja, en tanto, en la zona de Rosario se negociaba en mayo del año pasado a $ 3.870 por tonelada, al tiempo que ahora vale $ 7.600.

Si bien no hay datos oficiales, se estima que en lo que va de la era Macri se cerraron alrededor de 1.000 pequeños y medianos tambos en todo el país, lo que acrecienta el proceso de concentración en el sector que viene en crisis desde 2003.