Luego de las declaraciones que brindó este jueves el presidente Andrés Manuel López Obrador sobre las elecciones presidenciales que se realizaron en Ecuador el año pasado, el gobierno del país sudamericano declaró "persona non grata" a la embajadora mexicana, Raquel Serur Smeke.

A través de las redes sociales, el ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana de Ecuador confirmó que declaró "persona non grata" a la representante mexicana a raíz de "las recientes y muy desafortunadas declaraciones del Presidente sobre las elecciones de 2023 y el asesinato de Fernando Villavicencio". Asimismo, la Cancillería reiteró su "firme compromiso por el respeto a la dignidad y soberanía" de su estado.

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Esta medida diplomática se lleva a cabo luego de los dichos de Andrés Manuel López Obrador en su mañanera de este miércoles, cuando aseguró que las elecciones que realizó Ecuador en el 2023 fueron "extrañas". "Iba la candidata de las fuerzas progresistas como 10 puntos arriba. Como tres, cuatro, cinco candidatos más. Entonces, un candidato que habla mal de ella, de repente es asesinado y la candidata que iba arriba se cae, y el candidato que iba segundo sube", aseguró el tabasqueño en relación al asesinato de Fernando Villavicencio a manos del crimen organizado.

Durante su conferencia de prensa, López Obrador profundizó: "¿Y qué implementan o cuál es la segunda etapa? El crear un ambiente enrarecido de violencia, al grado que van los candidatos con chalecos a los debates. Pero todo armado. Lo más lamentable es que continúa la violencia, que utilizaron nada más el momento".

A raíz de esto, la cancillería ecuatoriana sostuvo que el país sudamericano "se encuentra aún viviendo el luto por ese lamentable hecho que causó conmoción en la sociedad y atentó contra la democracia, paz y seguridad". "El país continua enfrentando al crimen organizado trasnacional, que amenaza al Estado, sus instituciones democráticas y su población", agregó.

De esta manera, el gobierno de López Obrador suma un nuevo conflicto internacional y diplomático luego de los cruces que protagonizó con las autoridades de Perú, a las que criticó por la salida del poder del entonces presidente Pedro Castillo, quien fue acusado de impulsar un autogolpe de Estado. Además, hace pocos mantuvo un fuerte cruce con el presidente argentino, Javier Milie, a quien acusó de "conservador", lo que generó un ida y vuelta de acusaciones que tensionó el vínculo bilateral.