El líder nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, reaccionó a la revelación de que cobró una indemnización de más de un millón de pesos al dejar la presidencia de la CFE y la vinculó con un intento por presionarlo para que abandone las investigaciones del partido contra el ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte.

“El PRI está haciendo su trabajo y no nos dejaremos intimidar, y seguiremos hacia adelante, también, exigiéndole a los otros partidos políticos que se hagan cargo de sus propios escándalos de corrupción”, afirmó Ochoa, que incluso publicó un video en las redes sociales, en tono desafiante.

El PRI está haciendo su trabajo y estamos llegando puntualmente a la cita de la transparencia y el combate a la corrupción, advirtió Ochoa.

La reacción del hombre elegido por el presidente Peña Nieto para dirigir al PRI, se produce cuando el caso Duarte entra en la etapa decisiva. Hoy dirigentes de los distintos sectores del PRI de Veracuz firmaron un desplegado publicado a página entera en El universal en el que afirmaron que sería "un error monumental" de Ohoa -a quien llaman "maestro- aplicar "cualquier tipo de sanción" a Duarte.

"Generaría un pésimo antecedente, debilitando a nuestra militancia y fortaleciendo a nuestros detractores", agrega el desplegado firmado entre otros dirigentes veracruzanos, por la senadora Erika Ayala Ríos.

“Ha habido distintas investigaciones de instituciones del Estado mexicano, ha habido múltiples señalamientos en la prensa nacional y en consecuencia la Comisión Nacional de Justicia Partidaria sesionará para analizar el caso", respondió Ochoa, al ser entrevistado al término de un acto partidario en Guadalajara, Jalisco.

El dirigente reconoció que "cuando se afectan intereses se esperan reacciones", pero advirtió que la Comisión Nacional de Justicia Partidaria y el PRI seguirán revisando los casos y no cederán a presión alguna.

Anticipó incluso que la Comisión Nacional de Justicia Partidaria ya convocó a su sesión el lunes por la tarde, para revisar el caso de Veracruz, donde el gobernador Javier Duarte y otros funcionarios de su gobierno, han sido señalados por distintos actos que, dijo, "merecen una explicación puntual".

Y advirtió que también se analizarán casos de otros estados como el de Quintana Roo, donde enfrenta serias acusaciones de corrupción el ex gobernador priista Roberto Borge.

El ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte.

Cuartoscuro

Ochoa, que camina sobre una delgada línea roja al avanzar contra pesos pesados del PRI como Duarte, Borge y el ex gobernador de Chihuahua, César Duarte, reiteró que en el tricolor "estamos llegando puntualmente a la cita con la transparencia, la rendición de cuentas y el combate a la corrupción". 

"Es una demanda de la ciudadanía y es una responsabilidad de los priistas y de todos los partidos políticos, construir un Sistema Nacional Anticorrupción responsable, creíble, con prestigio, que nos permita avanzar en la ruta de la transparencia y la rendición de cuentas", agregó el hombre de Peña Nieto.

Los periodistas aprovecharon su presencia para preguntarle si este ánimo investigativo incluía  los señalamientos de corrupción en Jalisco. "El pronunciamiento que hemos hecho es que los priistas seremos los primeros en señalar los actos donde se le falle a la ciudadanía", contestó el dirigente.