Fue un encuentro frío, y así se reflejó en la conferencia de prensa que brindaron en Los Pinos. Sus discursos fueron diplomáticos -por supuesto- pero mostraron la grieta que siguen separando sus posiciones sobre los vínculos entre México y Estados Unidos. Lo concreto es que Donald Trump no pidió las disculpas que todos esperaban.

El primero en tomar la palabra fue Peña Nieto, quien se encargó rápido en aclarar que su Gobierno respetará el proceso electoral en los Estados Unidos y que sus equipos habían girado invitaciones también para Hillary Clinton, quien en las últimas horas se mostró molesta desde Twitter con este encuentro.

Peña Nieto repitió que México será un aliado del próximo presidente de los Estados Unidos, y que desea continuar la alianza entre los dos países. "Una alianza basada en el respeto mutuo, aunque no estemos de acuerdo. Siempre debemos estar abiertos a discutir cómo podemos mejorar las cosas, cómo podemos aclarar y superar malos entendidos", aclaró.

El mandatario mexicano tocó los puntos más sensibles de la relación con EU, y en específico con el discurso anti migración de Trump. Por ejemplo, consideró que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) ha sido beneficioso para ambos países.

Los mexicanos son gente honesta y trabajadora. Son personas de bien, que respetan la vida familiar, la vida en sociedad y la ley. Por eso merecen el respeto de todos

"Las exportaciones de EU a México alcanzan los 200 mil millones. Más de 6 millones de empleos estadounidenses dependen de las exportaciones que se hacen a México. Nuestro países le compra más a EU que a Alemania, España, Francia, Italia, Japón y Reino Unido juntos", aclaró.

Pero agregó: "Esto no significa que el TLCAN no pueda ser mejorado en beneficio de ambas partes. El próximo presidente de EU encontrará en mi Gobierno a un socio para modernizar el Tratado a fin de que sea más efectivo, y en ambos países se consigan más empleos, de más calidad y mejor pagados".

Peña Nieto dijo que pensar que la problemática de la frontera es sólo la migración ilegar, sería caer en una "mirada incompleta". Recordó entonces que México recibe una gran cantidad de armas ilegales y también dinero en efectivo, elementos que fortalecen a las cárteles. En ese sentido, pidió un "enfoque integral" para salvar vidas en los dos países. 

Cuartoscuro

"Señor Trump, quiero repetir lo que hace un momento le expresé en privado. Mi prioridad es proteger a los mexicanos, donde quiera que ellos se encuentren. La comunidad de México en EU contribuye todos los días con su talento a la prosperidad de nuestro vecino", señaló.

Y concluyó: "Los mexicanos son gente honesta y trabajadora. Son personas de bien, que respetan la vida familiar, la vida en sociedad y la ley. Por eso merecen el respeto de todos".

Trump habló de los beneficios que generaría un muro en la frontera para detener el traspaso ilegal de migrantes pero también de armas y dinero. Pero no aclaró quién lo pagaría.

Era el turno del magnate neoyorquino, quien arrancó su discurso hablando maravillas de los trabajadores mexicanos que empleó en sus empresas. "Siento mucho cariño por los mexicanos. No sólo por amistad, sino por todos los que empleo. Son gente fantástica. Espectacular gente trabajadora, los respeto mucho", aseguró.

De esa forma, evitó pedir disculpas por haber dicho que México enviaba hacia el norte a "violadores y criminales".

Luego marcaría algunas diferencias. Sobre el TLCAN, contradijo a Peña Nieto al opinar que había sido más beneficioso para México, pero no tanto para su país: "NAFTA debe ser mejorado para asegurar que los trabajadores en ambos países se beneficien de un trato justo".

Sobre el final, Trump habló de los "beneficios" que generaría un muro en la frontera, justamente para detener el traspaso ilegal de migrantes pero también de armas y dinero. "Sería beneficioso para ambos", dijo. Un periodista le consultó si continuaba con su idea de obligar a México a pagarlo. Respondió que se hablará más adelante de eso.