Sobre finales del año pasado los empresarios regiomontanos le advirtieron a Fernando Turner que estaban inquietos por el repunte de las cifras delictivas y que estaban dispuestos a aportar recursos económicos. El secretario de Economía y Trabajo entonces armó un pequeño grupo para definir cómo usar ese apoyo. La conclusión fue que era preciso capacitar a los policías estatales en el nuevo sistema penal acusatorio en el cual los elementos tienen un rol central en la custodia de las evidencias. Luego llegó la recomendación de contratar a Exiger, firma de Nueva York especializada en seguridad.

"La idea es que tengamos un sistema que pueda monitorear de manera directa todas las instancias, tanto de procuración de justicia como de la Policía, ir midiendo resultados, y eso nos permitirá en el mediano plazo ir teniendo el mejoramiento", dijo Jaime Rodríguez Calderón sobre la contratación.

Turner tiene cada vez más atribuciones en el futuro inmediato del gobierno del Bronco. Además de la elección de la consultora, prepara un plan económico para afrontar una etapa de mayor proteccionismo en Estados Unidos. En paralelo desfila por las grandes cabeceras internacionales (Financial Times, Wall Street Journal, etc.) enviando señales de lo que él entiende que debería hacer la Federación en el momento actual.

Un protagonismo en el gobierno del Bronco que no quita su llegada a Andrés Manuel López Obrador. Estuvo con el tabasqueño en Ciudad de México hace dos semanas. Turner es de los que creen que en algún momento el jefe de Morena y el Bronco podrían confluir a pesar de que hoy pot hoy se disparen mutuamente con munición gruesa.

Al jefe de Morena le sirve además porque Turner es mejor visto en la IP regiomontana que Alfonso Romo, que tiene un historial de conflictos, siendo el más conocido el que tuvo con su suegro Alejandro Garza Lagüera. La relación entre Turner y Romo no quedó bien de un negocio que emprendieron años atrás y resulto fallido.