En el último tramo de la carrera electoral en Nuevo León empieza a jugar el cálculo político hacia la próxima elección de gobernador en 2021. Especialmente en el panismo, donde sus referentes comulgan con esa tesis que dice que en tres años el electorado, todavía molesto con el PRI y desilusionado con la marca independiente volverá a pintar de azul la entidad norteña.

Ese cálculo de tiro largo ya está presente en la elección actual. En los últimos días en el entorno de Víctor Fuentes, aspirante al Senado, se habla con preocupación de un potencial acuerdo entre el jefe político del grupo San Nicolás Zeferino "Chefo" Salgado y estructuras del PRI e incluso independientes que tiene por finalidad dejar a Fuentes en segunda posición. Algo que complicaría seriamente sus chances de ir por la gobernatura.

Chefo ha dado señales. LPO reveló hace dos semanas que ya habla de un cambio en el partido estatal si no se gana al menos una de las dos alcaldías principales: Monterrey y Guadalupe. Con ese giro ya apuntaría a quitarle el partido al senador Raúl Gracia.

El entorno de Salgado, que va cómodo hacia ser nuevamente alcalde de San Nicolás, maneja que si Fuentes queda segundo y Felipe de Jesús Cantú y Pedro Garza pierden sus contiendas ya nadie podrá quitarle la candidatura a gobernador. Esa noción juega bajo el supuesto de que Rebeca Clouthier no buscará la gobernatura y de que Víctor Pérez quedará golpeado por su estrecha cercanía a Ricardo Anaya, una vez que este pierda la elección presidencial.

Notable: Salgado hizo cuanto pudo para que Fuentes no reeligiera en el municipio del norte de Monterrey. Le ofreció el Senado como una promoción, como un premio hacia más. Y ahora podría utilizar esa posición para afectar su carrera política. A esto se suman otras aristas como que en algunos mitines de campaña Chefo ha dicho que habrá una fuerte auditoría de algunas áreas de la gestión saliente.

Fuentes tiene a su favor, como contrabalance, que tiene buena llegada tanto con Francisco Cienfuegos como con Adrián De la Garza, los dos alcaldes más importantes del PRI en el estado. Es evidente: lo más posible es que Chefo opere en favor de los candidatos al Senado del PRI, que aporte cierta cantidad de votos que les de el primer lugar a Jorge Mendoza y Martha de los Santos hoy por hoy, oscilantes entre el segundo y tercer lugar. Con esa táctica, Chefo anula también las chances de ir por la gobernatura de Samuel García, que si sale tercero hasta tendrá que pelear para conservar la dirigencia local de MC.

Por otra parte será un dato político analizar cuántos votos va a sacar Ricardo anaya en San Nicolás y cuántos Andrés Manuel López Obrador. Especialmente si se considera que el futuro que planifica Salgado no es el mandato que inicia en el segundo semestre, sino la carrera por el Palacio de Cantera.