La secretaria de prensa Sarah Huckabee Sanders pareció confirmar uno de los escándalos más peculiares que desde hace semanas acechan a Donald Trump. Ayer los abogados de la estrella porno Stormy Daniels anunciaron que habían presentado una demanda contra el presidente Trump para invalidar un acuerdo de confidencialidad que la actriz firmó con el abogado del mandatario en 2016.

Hace doce años, según ha narrado ella, Trump y Daniels tuvieron un breve amorío. Días antes de la elección presidencial, el abogado de Trump, Michael Cohen, negoció un pago de $130,000 dólares para silenciar a la actriz. Cohen ha afirmado que el dinero salió de su propio bolsillo y no de la fortuna Trump.

Daniels alega que el acuerdo debe ser invalidado ya que quien firmó el documento fue Cohen, y no el presidente. La Casa Blanca ha negado desde el principio que haya existido dicho romance. En la época en que ocurrió el supuesto romance Trump acababa de tener a su quinto hijo Barron con su entonces nueva esposa Melania Trump.

Sin embargo, lo que irritó a Trump, de acuerdo con reportes publicados esta mañana por diversos medios, es que ayer la Sarah Sanders dijo ante el pool de prensa de la Casa Blanca que el proceso de arbitrio interpuesto por Cohen en una corte de California "fue ganado a favor del presidente", tácitamente reconociendo que sí había ocurrido un proceso legal alrededor del caso recientemente.

"El presidente ha abordado [el asunto] directamente y ha dejado muy claro que ninguno de estos alegatos son verdaderos", dijo Sanders.

"El presidente está muy molesto", declaró una fuente a CNN. "Sarah le dio esteroides a la historia de Stormy Daniels".

La demanda interpuesta por los abogados de Stephanie Clifford, nombre real de la actriz, detalla que "a pesar de que el señor Trump falló en firmar en acuerdo de confidencialidad, el señor Cohen procedió a enviar $130,000 por cable a la cuenta del abogado de la señora Clifford. Lo hizo a pesar de que no había un acuerdo legal y por lo tanto tampoco había un acuerdo de confidencialidad que restringiera a la señora Clifford de contar la verdad sobre el señor Trump".

El documento asegura que Cohen ha intentado intimidar a Daniels. "Por ejemplo, apenas hace unos días en o alrededor del 27 de febrero de 2018, el abogado del señor Trump [...] subrepticiamente inició un fraudulento proceso de arbitrio contra la señora Clifford en Los Angeles sin notificarla de antemano". Dicho proceso es el que Sanders reconoció en la conferencia de prensa.