Los socialistas madrileños confían en que las siglas del partido le darán un empujón a Reyes Maroto en los últimos días de la campaña. La candidatura de la exministra de Industria, impulsada desde Moncloa, no despega en las encuestas, que le dan a al PSM un lugar relegado en el Ayuntamiento de la capital: terceros, como hasta ahora, detrás de Más Madrid, la formación que casi hegemoniza el voto progresista.
El promedio de sondeos que hace DatosRTVE le da a Maroto un 17,2% de los votos -Rita Maestre conseguiría el 23,2%, frente al 40% del alcalde José Luis Martínez-Almeida-, un resultado que dejaría al PSOE en el mismo lugar en que se encuentra ahora mismo. Por eso la candidata socialista apuesta a buscar un nicho de votantes, que ya parece haber encontrado.
Maroto y su equipo de campaña pescarán en el mismo río que Más Madrid y Unidas Podemos. Prometió extender el Bono Cultural de los 26 a los 30 años, viajes gratis en el en la Empresa Municipal de Transportes y en Bicimad hasta fin de año. También sugirió el fomento de un parque público de 15.000 viviendas en alquiler para los más jóvenes.
En Cibeles deslizan que la aspirante socialista está recurriendo a promesas y medidas "populista" por la "desesperación de Pedro Sánchez", como confirma los comentarios a LPO una fuente en el PP de Madrid. Almeida ha basado su estrategia de confrontación con el PSM en el ninguneo a Maroto. "Me parece razonable que una persona que no tiene un amplio grado de conocimiento y que se presenta a las elecciones en 85 días tenga que hacer una campaña de promoción para darse a conocer", sostuvo.
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Almeida se refería a la campaña de presentación "Reyes de Madrid". Sin embargo, la candidata ha arremetido contra el PP por Doñana, un tema que amenaza con instalarse en el debate electoral de cara a mayo. "El PP es la antítesis de la lucha contra el cambio climático. Ayer ya vimos amenazas de Vox de querer entrar en el Gobierno. Es una alianza en contra de atajar el cambio climático", afirmó este miércoles.
Pero los estrategas de campaña coinciden en que Maroto llega a tarde a la conquista de los jóvenes porque es un sector del electorado que vota de forma transversal, es decir, que no es un voto atado necesariamente a la izquierda. La derecha, dividida entre el PP y Vox, está fidelizando el voto de las nuevas generaciones. En el caso de los partidos progresistas, Más Madrid lleva la delantera.
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No hacen falta estudios demoscópicos, los de Mónica García se han consagrado como el primer partido de la oposición, y el PSOE no aparece en el horizonte como eventual reemplazo de Más Madrid. A esta altura, Moncloa pide a los suyos en Madrid que hagan una elección digna. Esa es la misión que tiene Maroto de aquí a un mes.
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