Un distrito de perfil netamente PRO. Así observa Mauricio Macri a San Isidro, donde decidió involucrarse de lleno en esta campaña para apoyar la candidatura de un hombre de su confianza, Ramón Lanús, que logró en las PASO cortar con 40 años de hegemonía possista.

De acceder Lanús a la intendencia, en el macrismo dan cuenta de un dato no menor: con la Ciudad de Buenos Aires (de ganar Jorge Macri) y Vicente López (de continuar Soledad Martínez), San Isidro conformaría un bastión de poder amarillo en la zona más rica del país.

Con Gustavo Posse jugando en la interna de Juntos para el larretismo, como vice de Diego Santilli y poniendo a su hija Macarena como candidata a sucederlo en la intendencia, el expresidente consideró que era el momento propicio para pelear en la interna con uno de los propios.

Así, además de haberse mostrado con Lanús en el clásico del rubgy sanisidrense previo a las Primarias, esta semana Macri volvió al municipio para volantear con su candidato. El mismo día, había visitado a Soledad Martínez en Vicente López.

En un contexto de constantes guiños a Javier Milei, Macri reserva sus apariciones en la campaña de Patricia Bullrich solo para pisar territorios que buscan gobernar dirigentes de su círculo.

Lanús viene hablando con Jorge Macri y Soledad Martínez acerca de la coordinación entre las tres jurisdicciones para consolidar la estructura del PRO en el conurbano norte. 

Además de Vicente López y San Isidro, esta semana está previsto en la agenda del expresidente una recorrida por Pergamino, donde busca la reelección Javier Martínez, hombre que llegó a la intendencia con la receta Macri: antes presidió un club (Douglas Haig). También se prevé que el exmandatario visite en Junín al jorgemacrista Pablo Petrecca.

Voces del equipo de Ramón Lanús abordadas por LPO confirmaron que el candidato macrista de San Isidro viene hablando con Jorge Macri y Soledad Martínez acerca de la coordinación entre las tres jurisdicciones para consolidar un corredor norte que afiance la estructura del PRO en la región.

Sobre el respaldo de Macri, observaron que el expresidente "hoy está más convencido del rol de los intendentes que hace diez años".

Pensando en ese bloque tripartito, señalaron que, en Vicente López, Martínez venía teniendo "una dificultad grande" para coordinar temas de gestión con Posse.

Ramón Lanús da el batacazo en San Isidro y corta con 40 años de hegemonía de los Posse

Con esa perspectiva, en el entorno de Lanús hablan de tomar como referencia el modelo de Vicente López en materia de seguridad, uno de los temas donde focalizó sus prioridades el candidato de San Isidro para contrastar con el possismo.

También piensan mirar al distrito vecino en urbanismo y espacios públicos, donde ven que San Isidro "se vino muy abajo" y la diferencia con Vicente López "es muy notoria hoy". Otros aspectos de gestión donde buscará hacer hincapié Lanús es en "salud y modernización del municipio".

Titular de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) durante el gobierno de Macri y actual concejal, Lanús fue una de las sorpresas de las PASO al desbancar al possismo, con el triunfo ante Macarena por dos puntos y medio.

En el distrito, dentro y fuera de Juntos, no lo consideraron demasiado sorpresivo. Creen que la decisión del intendente de buscar vuelo bonaerense y dejar a su hija en la sucesión municipal no cayó bien en un segmento del electorado que históricamente votó por Posse. También, creen que el arrastre de la boleta nacional de Patricia Bullrich incidió.

Antes de las PASO, Macri se mostró con Lanús en el clásico del rugby sanisidrense.

Como atributos propios, en el entorno de Lanús destacaron el cierre político con el espacio vecinalista "ConVocación por San Isidro", que en las últimas elecciones venía jugado aparte, obteniendo entre 10 y 20 puntos.

Ese partido vecinal, que tiene entre sus principales referentes a la concejal Catalina Riganti, cultivó desde sus inicios un perfil antipossista. Sin embargo, en la campaña Lanús se cuidó de no plantear una guerra contra los Posse, sino posicionarse como una instancia "superadora".

Trabajando en las PASO una fuerte campaña territorial que buscaba contraponerse con las recorridas fuera del distrito del intendente Posse, plantado como candidato a vice de Santilli, Lanús busca seguir hacia las generales con ese plan de una campaña "cuerpo a cuerpo".

En su entorno aseguran que "relajarse" post PASO puede ser perjudicial. En ese aspecto, creen importante lograr un triunfo "contundente" pensando en la próxima conformación del Concejo Deliberante.

Lanús con los Posse, Bullrich, Grindetti, Santilli y Espert. Acto de unidad post PASO en San Isidro.

Saben que no hay manera de contar con quorum propio pero confían en "construir las mayorías necesarias para gobernar". Para eso, creen que no es lo mismo meter seis concejales (repartidos en tres propios y tres possistas), que lograr ocho, ya que tanto el séptimo como el octavo casillero de la lista de Juntos los ocupan dirigentes que reportan a Lanús.

En el búnker del candidato de Macri creen que hoy no es prioritario "sobreactuar un perfil propio" para diferenciarse de Posse, sino buscar puntos de unidad para contener al núcleo duro del possismo. Así, realizó actividades conjuntas como el acto con Santilli, Grindetti, Bullrich, Macarena y Gustavo Posse en Villa Adelina, bastión históricamente possista.