La fragmentación política de la Legislatura encendió las alarmas del oficialismo y en el PRO ya piensan en que todos los candidatos, incluídos los diputados porteños, salgan de una gran Paso que permita mayor margen de maniobra al eventual ganador de la jefatura de Gobierno.

Horacio Rodríguez Larreta decidió lotear las listas es pos de sostener proyecto político. Desde el PRO le cuestionaron su "generosidad" a la hora de armar las boletas. El jefe de gobierno solo logró colocar a un dirigente propio, Claudio Romero o dos si se cuenta a Emmanuel Ferrario, el vice 1° del parlamento porteño.

El oficialismo aprobó la reforma del estatuto docente en una sesión tensa

Hasta diciembre de 2021 el oficialismo contaba con un bloque de 38 miembros si se suman los aliados, pero con el recambio electoral perdió seis escaños. El problema es que ni siquiera esos 32 votos están garantizados: en la sesión donde se trataron cambios al estatuto docente Roberto García Moritán decidió no acompañar el proyecto del oficialismo, que terminó recostado en los votos del peronismo y de la izquierda.

Actualmente el oficialismo se compone de los bloques de Vamos Juntos, que incluye 13 del PRO, y 5 de la Coalición Cívica y 2 de Confianza Pública y 8 legisladores del radicalismo, 2 del socialismo y 2 de Republicanos Unidos.

Es cierto que Larreta trató la mayoría de los proyectos importantes en la primera mitad de su segundo mandato: aprobó la rezonificación de varios terrenos, entre ellos la que le permitirá a IRSA comenzar a construir la Dubai de Puerto Madero, también tuvieron luz verde cientos de excepciones urbanísticas.

Los problemas pueden surgir cuando haya que enviar una ley de 40 votos, un número muy lejano a la realidad del oficialismo.

"Es una Legislatura más conversada, con más negociación, pero es la política. Horacio para llegar a donde llegó tuvo que ceder lo que tuvo que ceder", dijeron desde el PRO a LPO.

En caso de que un candidato de Vamos Juntos se quede con la jefatura de gobierno, en el PRO creen que lo más sensato sería hacer una gran Paso en dónde se voten todos los cargos, desde comuneros a legisladores. Eso le permitiría al ganador contar con una base más sólida de la resultante de las listas consensuadas.