El peronismo porteño analizará hasta el viernes próximo la decisión de que Leandro Santoro se presente al balotaje. El plazo coincide con el final del escrutinio definitivo, que podría consagrar a Jorge Macri como jefe de Gobierno sin necesidad de una segunda vuelta.

Jorge quedó a 4 décimas de ganar el distrito: la constitución porteña exige la mitad más uno de los votos afirmativos para definir la elección.

Cómo ganar una pelea imposible

Aún falta contar 120 actas. El resultado final se conocería el viernes y aún queda por saber si Juntos consigue 15 o 16 legisladores o el peronismo pasa de 9 a 10. María Pace, sobrina de Elisa Carrió, y la camporista Delfina Velázquez son quienes se disputan el escaño en el parlamento porteño.

Son varias las cuestiones que están bajo análisis. La más obvia es sumando una ínfima porción de los votos en disputa ganaría el balotaje. En el peronismo creen que es mejor la foto de la levantada de Santoro, que sumó 10 puntos entre las Paso y las generales, que terminar en la Ciudad con una derrota por 30 puntos en la segunda vuelta.

De todas formas, anuncian que la decisión será política y no tendrá en cuenta argumentos vinculados a la organización de los comicios.

No pasa desapercibido que la segunda vuelta porteña se disputará el mismo día que la nacional. Ahí la discusión es si resulta conveniente activar al electorado macrista en una elección local que tiene trascendencia nacional.

Jorge deberá a salir a buscar los votos del libertario Ramiro Marra y la asociación de Juntos con Milei es lo último que busca Sergio Massa.

Por otro lado, Santoro es un dirigente originario del radicalismo, el sector al que Massa aspira a convencer para imponerse a Milei. Por eso hay quienes piensan que la campaña porteña podría servirle al postulante presidencial para sumar votos en la nacional.

La decisión la tomarán Massa, Cristina Kirchner, Juan Manuel Olmos, Mariano Recalde y Leandro Santoro en los próximos días.